Greg Manteufel, de Wisconsin (EEUU), ha perdido las manos y las piernas debido a una infección provocada por la saliva de su perro. Ni él ni su familia imaginaban que podría causarle sepsis. 
2/8/2018 | Redacción JyS 

amputan piernas y manos despues de que un perro le lamiera
A la izquierda Greg tras ser operado, a la derecha junto a su perro. / Dailymail

A principios de verano, Greg Manteufel, de 48 años, fue infectado por Capnocytophaga canimorsus, una bacteria que se encuentra en la saliva de los perros y que puede causar sepsis. Aunque el 69 por ciento de los canes y el 54 de los gatos presentan esta bacteria, según publica Daily Mail, las probabilidades de que quienes tienen estos animales en sus casas padezcan el mismo problema son remotas –menos de un 1 por ciento–. Además, aunque podría trasmitirse a los humanos por una mordedura o lamedura, no todos desarrollan la infección. Solamente son sensibles aquellos que tengan una afección anterior. «No podemos entender que de repente, a los 48 años, pase esto porque ha vivido siempre con perros», se lamenta su mujer, Dawn Manteufel.
Aunque Greg comenzó a experimentar síntomas parecidos a los de la gripe en un principio, no fue a urgencias hasta que aparecieron varios hematomas en sus brazos y piernas. La Dra. Silvia Muñoz-Price, especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Froedtert, relató a WITI-TV que la infección entró en su sangre y «desencadenó una respuesta muy grave en su cuerpo». Su presión arterial bajó y la circulación en sus extremidades disminuyó drásticamente. «Parecía que alguien le había golpeado con un bate», cuenta Dawn Manteufel.
En ese momento, los médicos le comunicaron que la infección se había extendido a las cuatro extremidades y le había generado graves daños en músculos y tejidos, por lo que tenían que amputarle manos y piernas.

Aunque muy raro, no ha sido el único caso

En 2016, médicos de Londres documentaban el caso de una mujer de 70 años que había sido infectada con Capnocytophaga. Comenzó notando confusión, después dolor de cabeza, diarrea, fiebre alta y, finalmente, sepsis e insuficiencia orgánica. 
Mientras que la infección se había visto antes en personas que habían sido mordidas por perros, nunca se había dado el caso de contraerla por simples lameduras. Los doctores advirtieron entonces que era «muy extraño». Afortunadamente en aquel caso la mujer se recuperó después de dos semanas con antibióticos y cuidados intensivos.
El Dr. Bruce Farber, jefe de enfermedades infecciosas del North Shore University Hospital y Long Island Jewish Medical Center en Nueva York, afirmó a CBS News en aquel momento que los médicos conocen esta bacteria desde hace décadas. «Este es un organismo que se  transmite a través de la boca del perro y causa una grave infección por sepsis. Pero generalmente se trata de personas que están inmunocomprometidas y que han sido mordidas por un perro. Sin embargo este caso es muy raro porque fue por una lamedura». 
Después de las operaciones, la familia Manteufel ha hecho una página de recaudación de fondos para sufragar los gastos de estas, de las prótesis y de la recuperación. Hasta el momento han conseguido recaudar 18.100 dólares de los 25.000 que estimaron necesarios para todo el proceso.