Sigue la polémica en torno al vídeo en el que un ciervo aparecía agonizando tras llevar varios días sin comer y sin beber en el interior del Parque Nacional de Monfragüe, en Extremadura. Después de que se hiciera evidente la crueldad con la que están siendo eliminados los animales en esta zona, y conscientes de que se trata de una decisión política propiciada por las presiones ecologistas, algunos de estos grupos han comenzado a señalar que se trata de un bulo y que el vídeo no ha sido grabado en esta área protegida.

Pero no sólo desde grupos ecologistas han difundido que no se trataba de Lugarnuevo, la finca de Parques Nacionales que rodea Villareal de San Carlos (Cáceres), para eludir las críticas. Carmen Martín, directora técnica del Parque Nacional de Monfragüe, también se ha sumado a esa estrategia y ha asegurado a El Periódico de Extremadura, que la grabación no puede «identificarse» si está realizada «dentro o fuera del parque» y que la trampa «no se corresponde con ninguna de las jaulas del programa de ungulados que se está desarrollando» en él. Esto no es del todo cierto, puesto que la asociación Amigos de Monfragüe ya difundió ayer imágenes de una decena de jaulas más de las que están instaladas en el parque y alguna de ellas sí se corresponde con la aparecida en la filmación. Pero hay más.

Jara y Sedal ha establecido contacto con el autor del vídeo, el cuál no solo ha confirmado que su grabación es real sino que además ha regresado al lugar en el que lo filmó y ha compartido su ubicación exacta para mostrar que, efectivamente esa jaula estaba en Monfragüe. Curiosamente la jaula ya había sido retirada, aunque aún se puede apreciar el lugar exacto en el que había sido instalada y en la zona se podían ver restos de guantes desechables manchados de sangre así como los restos del cadáver de un jabalí.

Punto exacto de grabación del vídeo

El vídeo que muestra el lugar exacto

«Miren, señores. Tras la polémica suscitada del vídeo del venado maltratado en Monfragüe, no nos hemos visto en otra que volver al lugar de los hechos. Casualmente la jaula ya no está, pero aquí se encontraba», declara el autor del vídeo, que prefiere preservar su anonimato. «Mirad las roderas de haber venido a retirar todas las pruebas. Están frescas de hace tres o cuatro días. Pero se les ha olvidado tirar la basura, porque mirad lo que me he encontrado», señala el hombre que graba el vídeo, y enseña los restos de un cadáver muerto al lado del lugar en el que estaba la jaula. «Que le cuenten cuentos a otro», indica.

Y en otro vídeo, ofrece más pruebas: «Aquí podéis comprobar que se trata del mismo lugar», enseñando de nuevo las roderas frescas. «Plásticos y más plásticos, plásticos llenos de sangre y más plásticos», muestra el hombre. «Y mirad lo que estoy viendo más adelante, en el medio del camino. En pleno corazón del Parque Nacional, sacos de pienso de venir a cebar la jaula», y muestra cubos de pintura de plástico y de metal. «¡Qué gestión!», se lamenta el hombre que graba la escena.

Más de una veintena de jaulas

Tal y como se puede leer en los informes de seguimiento del Programa de Acción Selectiva de Ungulados silvestres en el Parque Nacional de Monfragüe, a los que Jara y Sedal ha tenido acceso, este espacio natural ha llegado a contar hasta con 25 jaulas trampa activas en los últimos meses. Aunque están destinadas a los jabalíes, no han evitado la captura de ciervos, como hemos podido ver en el vídeo que salió a la luz esta semana. Este sistema de control poblacional está siendo combinado con cercones en los que se concentra a ciervos y jabalíes aportando alimento para atraerlos y lograr encerrarlos. Posteriormente se matan a tiros, como se puede leer en el mismo informe de resultados.