PACMA comparte en Twitter la falsa historia de un pianista que toca para un elefante«ciego» –realmente estaba tuerto– y Cuesta la desmonta por completo. «Me ha dado vergüenza ver vuestro post».
27/7/2018 | Redacción JyS
El conocido presentador de televisión que estalló hace unos meses diciendo que el animalismo se ha convertido «en una moda», «en una fuente de paletos y paletas» y que es «es la lacra de la naturaleza», arremete ahora contra PACMA tras compartir una historia falsa, según el activista, sobre un elefante ciego y el pianista que toca para ayudarlo.
El desencuentro comenzó con la publicación que PACMA compartió en su Twitter: un vídeo previamente difundido por la página Cultura Inquieta en el que explicaban la supuesta historia de Romsai, un elefante ciego al que el pianista Paul Barton le toca música para ayudarlo.
El idílico cuento hubiera pasado como cierto si no hubiera sido porque Frank, conocedor del caso ya que vive en Bangkok, lo ha desmontado por completo: «Romsai vive en Kanchanaburi, donde todos los días esta expuesto a turistas. Ciego de un ojo como muchos elefantes. Semental para que nazcan nuevos en cautividad. Más que santuario… negocio!!! Me ha dado VERGÜENZA ver vuestro post». Ni era ciego, ni era una historia de amor por los animales.
PACMA borra la noticia falsa
Tras la respuesta de Cuesta desde PACMA se apresuraron a borrar la publicación original, aunque la del presentador de televisión aún puede verse en su muro. En ella ha añadido el siguiente vídeo de hace un par de años en el que explica la situación de estos elefantes, y habla del pianista en cuestión, con el que por lo visto ya ha tenido algún que otro encontronazo.
https://www.youtube.com/watch?v=rOqHcHHvCiQ
«Es un tipo que conozco, porque me he peleado con él alguna vez aquí, en Tailandia. Viene a Tailandia y hace la tontería de que toca el piano para los elefantes, va de un sitio a otro para los turistas. Le pagan, claro, le pagan pasta, luego pone los vídeos en YouTube, y cobra más pasta. Pero lo que está haciendo es abusar de los animales», confiesa Cuesta refiriéndose a Paul Barton.
En las imágenes Frank pone como ejemplo un vídeo donde aparece tocando el pianista y en el que los animales están siendo sostenidos por sus adiestradores, que los mantienen en el lugar amenazándoles con herramientas con picos o sosteniéndoles de las orejas y cuestiona: «¿Por qué no se pone el tipo con el piano solo con 5 elefantes en frente, sin ningún paisano alrededor, si les calma tanto?».
Frank finaliza explicando que los animales salvajes no conectan con la música. «Esa falta de información hace que vayamos a sitios y metamos la pata y sigamos contribuyendo a un negocio que es brutal».