Edad: 59 años.
Lugar de nacimiento: Cáceres.
Lugar de residencia: Cáceres.
Formación: Técnico superior electrotecnia. Experto sociolaboral.
Modalidad de caza preferida: Caza menor con perro.
Manuel Gallardo se considera «federado por convicción». Su trayectoria federativo comienza en los años 80, cuando era competidor de recorridos de caza y compak sporting. Posteriormente, aun sin pertenecer a ningún club, siguió federado por convicción de que las federaciones de caza eran las únicas organizaciones que podían defender sus intereses «como deportista y como cazador».
Después de un lustro, una vez terminada su etapa en el Consejo Económico y Social de Extremadura, donde ayudó a dictaminar dos leyes de caza extremeñas, fue invitado por José María Gallardo –actual presidente de FEDEXCAZA– para incorporarse a la Federación Extremeña como vicepresidente, donde ha desempeñado el cargo hasta la actualidad.
Después de esta trayectoria, ahora presenta su candidatura a la presidencia de la Real Federación Española de Caza. Hablamos con él.
Pregunta. ¿Qué es para usted la RFEC?
Respuesta. Obviando lo formal, la RFEC es la herramienta que nos va a permitir perpetuar la actividad cinegética, practicar nuestro deporte en libertad y obtener el reconocimiento social que merecemos. Hay quién puede creer que la RFEC es un fin en sí mismo, pero se equivoca.
P. ¿En qué momento diría que se encuentra la entidad?
R. Creo que está en el mejor momento para afianzar un proyecto de unión entre todas las federaciones autonómicas y construir la RFEC del siglo XXI. Un proyecto a corto, medio y largo plazo que conforme una organización dinámica, participativa y con capacidad para adaptarse a los momentos que están por venir.
P. ¿Por qué quiere ser su presidente?
R. ¿Hay mayor honor para un federado, que presidir la RFEC? Yo creo que no. Pero no se trata de eso. Toda mi vida ha sido un continuo aprendizaje en múltiples disciplinas del conocimiento. Creo que he atesorado una vasta y rica experiencia y ha llegado el momento de ponerla al servicio de la federación, de los federados y de la caza. En cualquier caso, solo soy la cara visible de un enorme grupo de personas que tienen en su ideario la defensa de la actividad cinegética. Este es un proyecto colectivo.
«Creo firmemente en un modelo descentralizado de representación y las federaciones autonómicas tienen el suyo y hay que reforzarlo».
P. ¿Cuáles son los pilares del proyecto que presenta?
R. Las relaciones institucionales en el ámbito que le corresponde a la RFEC, que es evidentemente el nacional e internacional. Creo firmemente en un modelo descentralizado de representación y las federaciones autonómicas tienen el suyo y hay que reforzarlo. ¿Quién conoce mejor la caza en su territorio que quién la vive directamente?
El otro gran pilar es la comunicación. Existe un problema con los medios generalistas, que ofrecen habitualmente una imagen negativa del sector. Las redes sociales son un campo de batalla en el que tenemos que actuar con mucho tacto e inteligencia, el mejor o peor embajador de la caza es el cazador. Tenemos un gran público objetivo que son esos millones de personas que no cazan pero que no están contra la caza. Nuestra estrategia de comunicación debe tener como objetivo ofrecer una información clara y veraz, y ser capaces de atraer generando noticias de interés y siendo referentes en la lucha contra las falsas noticias y los ataques al sector cinegético.
El apoyo a la investigación es otro eje imprescindible. No solo mi trabajo en un centro tecnológico hace que piense que la investigación es vital y que gracias a ella la humanidad ha progresado espectacularmente, ahora lo tenemos muy reciente con las vacunas de la Covid 19. La investigación va a darnos las respuestas y soluciones a problemas que no somos capaces de resolver con nuestros conocimientos ordinarios. Por otro lado, las organizaciones que investigan son mucho más creíbles que las que no lo hacen, tenemos que basarnos en estudios científicos para rebatir afirmaciones falsas de organizaciones que están contra la caza.
R. ¿Cómo pretende materializarlos? Concrete las principales medidas que adoptaría si llegase al cargo.
Las medidas son trabajo y más trabajo. Primero hay que hacer una adecuada planificación en la Junta Directiva, que si yo presido estará formada por todos los presidentes de federaciones autonómicas. Nada de improvisaciones ni ocurrencias, sino partiendo de un estudio detallado de la situación, y valorando nuestras debilidades y fortalezas diseñar un plan de trabajo con objetivos creíbles, cuantificables tanto temporal como económicamente y evaluables en el tiempo. Lo urgente no puede tapar lo importante y por ello es necesario tener un plan y una estrategia. Creo que sabemos qué hay que hacer, cómo hacerlo y lo haremos.
P. ¿Qué opina del proyecto de su rival?
R. Lo he leído con atención. Los miembros de la Asamblea General decidirán con su voto.
P. ¿Qué hará si pierde? ¿Cómo será su oposición?
R. Las elecciones se celebrarán y ese día terminarán. Al minuto siguiente todos a trabajar con dedicación, ilusión y espíritu colaborativo. Yo me debo a mi organización y ocuparé el lugar que se me pida y desde ahí trabajaré como hasta ahora, de forma humilde y abnegada por el futuro de la caza y en la defensa de los miles de federados que conformamos esta magnífica institución.
P. Si finalmente es presidente… ¿Qué federación le gustaría dejar a su sucesor?
R. Una Real Federación Española de Caza del y para el siglo XXI, más que una federación.
Puedes consultar su programa completo aquí.
Este es su vídeo de campaña.
