Los cazadores Rafael Castillo y Eduardo Vilchez –de 30 y 40 años de edad- vivieron, el pasado 21 de septiembre, una apasionante jornada de aguardo con doble éxito en su coto social, ubicado en las cercanías de la localidad granadina de Alfacar. Ahora, han decidido narrar el lance con motivo del concurso que Jara y Sedal tiene puesto en marcha junto a Beretta Benelli Ibérica.
«Era nuestra segunda semana de aguardos de las dos que nos dan en la sierra del coto social del pueblo. La semana anterior estuvimos dando un paseo mirando rastros y vimos que había dos zonas en las que había unas buenas pisadas de dos grandes machos. Así que el lunes 21 quedamos por la tarde para realizar un aguardo», comienza relatando Castillo.
«Como siempre, nos dijimos que si para la 1:00 aproximadamente no había entrado nada, que nos llamábamos y recogíamos. Nos fuimos cada uno para nuestro puesto y nos deseamos suerte, nunca pensando que esa noche iba a ser única», describe el cazador sobre el inicio del aguardo.
El cochino abatido por Rafael, el primero en caer
Después de despedirse sobre las 20:30 horas de la tarde, Rafael se colocó en su puesto. Para las 21:00 horas escuchó un ruido por encima de él, sobre unos 200 metros. «Empezaron a bajar los jabalíes poco a poco hasta que dieron la cara media hora más tarde. Les encendí la luz y vi que era una gran marrana acompañada de sus rayones, así que apagué y siguieron como si nada en el mismo sitio», relata.
Sobre las 21:50 horas, la piara salió en estampida y el monte se quedó en total silencio. Al instante, se escuchó un fuerte crujir de las ramas y ahí fue donde el cazador volvió a tomar su rifle para afrontar el lance.
Sobre las 22:20 decidió que sería el momento de volver a encender la luz. «Al tocar el pulsador lo vi, ahí estaba, mirando fijamente hacia el frente, dándome el lado al cual no dudé en apuntar y apretar el gatillo. El jabalí cayó fulminado sobre el sitio. Fui hasta él y me di cuenta de que era el marrano que días anteriores habíamos visto sus pisadas», cuenta el cazador sobre el emocionante momento.
«Como vi que era grande y no podía moverlo solo, esperé en el puesto para ver si mi compañero tenia ocasión de realizar otro lance en esa misma noche», sigue relatando.
El descomunal jabalí de Eduardo con un trofeo de 119 puntos
Eduardo Vilchez, por su parte, ha narrado a Jara y Sedal los entresijos del jabalí con el que se hizo aquella misma noche, que tenía un trofeo que ha dado medalla de oro con 119 puntos. Al inicio del aguardo, Eduardo caminó hacia el puesto, situado en una cañada donde había unas piedras grandes.
«Estuve toda la noche esperando y no escuchaba nada; es más, no escuché ni el disparo de mi compañero Rafael», relata. Sobre las 00:00 horas, el cazador miró el reloj y, viendo que estaba tranquila la noche y pensando que no iba a entrar nada, decidió llamar a su compañero cuando, de pronto, escuchó las grandes pisadas con golpes secos del marrano que estaba esperando», explica.
Poco a poco se fue acercando cada vez más y más hasta ponerse a tan solo 8 metros detrás de unas matas donde se encontraba el cazador. «Tenía el rifle encima de mis piernas y no quería moverme para no hacer ruido. Lo dejé y poco a poco se fue hacia el lugar de tiro dándome la espalda, hasta que se puso de lado y pude coger el rifle». Aquella noche usaba un Titán 6 de cerrojo en calibre .30-06 con balas Sellier & Bellot de 180 grains y visor Pentaflex Cazorla 2.5x10x50. «Encendí mi linterna y apunté a la cepa de la oreja, cayendo al instante», asegura Eduardo.
Al momento le llamó su compañero Rafael, que había escuchado el disparo. Fue entonces cuando uno a otro se contaron lo que había dado de sí una noche mágica en la que consiguieron abatir dos espectaculares macarenos.
La mejor historia de caza de esta temporada tiene un premio valorado en 1.700€ en Jara y Sedal
¿Has cazado algún animal destacable, curioso o piensas que el lance fue único? Pues Jara y Sedal y Beretta Benelli Ibérica pueden premiar tu historia gracias al concurso que comienza hoy. Si tu historia es elegida, puede que ganes un magnífico visor de caza Burris Ballistic III 4-16×50 con telémetro y programa balístico integrado.
Para optar al premio solo tienes que enviarnos un email a [email protected], o un mensaje privado a cualquiera de nuestras redes sociales contándonos tu mejor historia de caza mayor, adjuntar las fotos de ese día y tu número de teléfono, además de seguir en Instagram el perfil de Jara y Sedal (@jaraysedal.es) y el de Beretta Benelli Iberica (@beretta_benelli_iberica). No tiene por qué ser el relato de un trofeo medallable, aunque se valorarán aquellos extraordinarios, curiosos o llamativos a los que les acompañe una buena historia. Aquí te contamos cómo participar.