¿Eres un loco de la pesca y te gustaría que tu hijo sintiese lo mismo? En este artículo te damos los consejos clave para conseguir que se aficionen a la caña y al sedal desde pequeños.
30/5/2017 | Redacción JyS

Niños aprendiendo a pescar/ Shutterstock

Acercarlo a la naturaleza es uno de los mejores regalos que podemos hacer a un niño. Enséñale a respetar el campo y a compartir un día rodeado de amigos en un entorno que le ofrecerá valores distintos a los de la ciudad, ¡será perfecto para que se sienta bien! Ayúdale a experimentar la emoción pura y desenfrenada al ver una curva en la caña y comprobar qué pez hemos conseguido pescar.
Estamos en una época donde prima la tecnología, los teléfonos móviles y los videojuegos, así que hazle desconectar, es el momento perfecto para que tome contacto con la naturaleza enganchándole a la pesca. ¡Toma nota de los 10 trucos para conseguirlo!

1. Elige material a su medida

Su fuerza y el tamaño de sus manos determinarán qué caña escoger. Decántate por un carrete ultraligero que sea fácil de mover y una caña de pequeño tamaño. Encontrarás los combos perfectos para que él se sienta cómodo.

2. Peces de pequeño tamaño

Pónselo fácil al principio para que se pique rápido. No hay nada más gratificante para ellos que comprobar lo buenos que son en la actividad que están realizando. Nadie mejor que tú controla los tipos de peces que hay en los lugares de alrededor así que elige ir donde los peces que más piquen no sean demasiado pesados ¡Le encantará sacarlos del agua tal y como tú lo haces!

3. La caña siempre en casa

Montaje de pesca. / JyS

Enséñale cómo limpiar su caña, a montarla, a poner el sedal y el anzuelo. Esto lo podéis hacer desde el salón, una tarea necesaria para que sea todo un experto cuando lleguéis al agua. Cuanto más lo repita antes aprenderá, pero recuerda, no debes aburrirlo con montajes demasiado complicados o perderá interés.

4. La pesca, momento de aprendizaje

Avefría. / JyS

La pesca no es solo el hecho de lanzar un caña y coger un pez, se trata de enseñar a los niños sobre la naturaleza que los rodea. Hacer de sus viajes momentos de enseñanza. Señalar el águila volando por encima, las libélulas zumbando, los conejos entre los matorrales. Los niños son esponjas y aprenderán rapidísimo siempre y cuando su mente esté activa.

5. ¡Diversión al poder!

Deja que sean ellos lo que digan lo que les gustaría hacer. Un baño en el agua, una carrera en la orilla o hacer castillos de arena en la playa pueden amenizar el día. No alargues las jornadas más de la cuenta, las primeras veces tienen que ser experiencias positivas. Con un par de horas será suficiente.

6. Juega seguro

Como bien dice el dicho ‘que vale más prevenir que curar’. Ponle salvo con un chaleco salvavidas ajustado apropiadamente. Asegúrate de que lo lleve puesto en todo momento y evita accidentes indeseados.

7. No te olvides de la merienda

El picnic no debe faltar. Prepara una nevera con zumos y agua, además de unos buenos bocadillos para levantar la energía de los más pequeños. Pero el truco para motivarlos son unas golosinas, las cuales también podrás utilizarlas de premio cuando consigan pescar sus primeros peces.

8. No te olvides de las fotos

Ejemplo de cámara deportiva con la que podrás captar los momentos especiales de pesca / JyS

Te servirán para hacerle recordar lo bien que lo pasó mientras estaba de pesca. Sus logros, los juegos con sus amigos, los momentos especiales en el agua… Déjale que presuma de lo que consiguió e incrementa sus ganas de volver.

9. Cocinar y pescar con niños

Liberar a los peces que pesquéis tiene que ser una acción a la que debe estar acostumbrado. No tienen por qué morir sino que vuelven al agua junto a sus compañeros. Sin embargo no es negativo que en algunas ocasiones llevemos a casa lo que hayamos pescado. Le servirá para ver la procedencia de los alimentos. El origen de la comida no son los supermercados.
Déjale que te ayude en la cocina y divertíos mientras elaboráis una rica receta.

10. Helado como toque final

¿Qué te parece si a la vuelta a casa le premias con un helado? No hay nada que les haga más ilusión que refrescarse con el sabor dulce de un rico polo. Volverá contentísimo durante todo el trayecto y te asegurarás de que la experiencia la recuerde como muy positiva de principio a fin.