La creatividad y el ingenio de los españoles parece no tener fin. Especialmente cuando de conseguir cosas gratis se trata. Prueba de ello es la escena protagonizada en San Juan de Aznalfarache, Sevilla, por un vecino aficionado a la pesca que decidió optimizar sus esfuerzos para recoger caramelos lanzados desde las carrozas. Desde el balcón de su vivienda en un segundo piso, el hombre utilizó su caña de pescar para descolgar un paraguas abierto, atado al sedal, y recoger sin esfuerzo los dulces que los Reyes Magos lanzaban a la multitud durante la cabalgata.
El vídeo muestra cómo el peculiar «pescador de caramelos» desliza su caña con precisión, logrando que los dulces caigan directamente en el paraguas. La escena provocó risas y aplausos tanto entre los asistentes como en la comunidad digital, aunque también ha habido quien le ha criticado por ello.
Una Cabalgata adelantada por el mal tiempo
Aunque tradicionalmente las Cabalgatas de Reyes tienen lugar el 5 de enero, este año la previsión meteorológica ha obligado a varios municipios, como San Juan de Aznalfarache, a adelantar las celebraciones para evitar los estragos del mal tiempo. Según los expertos, fuertes vientos y lluvias están previstos para gran parte de España durante la jornada del 5 de enero.
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En Andalucía, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido avisos amarillos por rachas de viento que podrían superar los 60 kilómetros por hora, especialmente en zonas costeras y de montaña. En el resto del país, se espera un panorama igualmente complicado: lluvias intensas en el norte y el oeste peninsular, nieve en cotas altas del Pirineo y vientos fuertes en casi todas las comunidades autónomas.
Ante esta situación, numerosos municipios han optado por adelantar la llegada de los Reyes Magos para garantizar la seguridad de los asistentes y mantener viva la ilusión de los más pequeños. A pesar de las modificaciones, las cabalgatas siguen siendo un espectáculo lleno de magia y color, con miles de niños emocionados al ver a Melchor, Gaspar y Baltasar recorrer sus calles.
