El anuncio de una amplia finca situada en Albacete ha despertado interés entre aficionados al medio rural. La propiedad reúne usos agrícolas, forestales y un marcado componente cinegético, además de una vivienda principal que supera los 1.600 metros cuadrados y diversas construcciones auxiliares dispuestas en una parcela cercada.
La extensión total abarca algo más de 1.100 hectáreas, en las que conviven zonas de secano, almendros, terreno en regadío, viñedos de cabernet sauvignon en espaldera, frutales y áreas de monte mediterráneo. Este mosaico de cultivos y manchas de matorral favorece la presencia de ciervos, jabalíes, perdices, conejos y liebres, habituales en la zona y descritos en la publicación como parte del atractivo del entorno.
La finca incluye también un pequeño huerto, superficies de cerezos y nogales, y un viñedo de algo más de cuatro hectáreas mantenido con riego. Entre las infraestructuras agrícolas destacan diversas naves, almacenes y corrales que superan los 2.600 metros cuadrados, junto con un edificio destinado a guardería y otro para actividades vinculadas al aprovechamiento del terreno.

Una vivienda de grandes dimensiones
La construcción principal es una mansión de 1.661 metros cuadrados repartidos en varias plantas. Cuenta con numerosos dormitorios y baños, varios salones, cocina industrial, una vivienda secundaria y un amplio garaje con capacidad para más de una decena de vehículos. El conjunto se asienta sobre una parcela de 5.000 metros cuadrados totalmente vallada, con accesos acondicionados y espacios exteriores ajardinados.

A todo ello se suma la existencia de distintas maquinarias y vehículos agrícolas, entre ellos tractores y utilitarios todoterreno, empleados para las labores de mantenimiento del campo. El anuncio detalla también la disponibilidad de derechos de agua y un pequeño embalse acumulador que garantiza el suministro para riego en las zonas productivas.

Un entorno pensado para usos agroforestales
El equilibrio entre tierras de cultivo, zonas de matorral y áreas de monte permite diferentes aprovechamientos a lo largo del año. La presencia de fauna silvestre, especialmente especies como el ciervo y el jabalí, es habitual en la comarca y añade valor a un entorno donde el relieve, la vegetación y la baja densidad de viviendas favorecen la tranquilidad y el desarrollo de actividades ligadas al mundo rural.
Para quienes deseen conocer el anuncio completo y consultar el resto de detalles, pueden acceder a la publicación original en este enlace.








