En los fondos marinos, donde el peligro acecha en cada grieta y la supervivencia depende del sigilo y la astucia, algunos animales han desarrollado técnicas tan elaboradas que parecen sacadas de una película de ciencia ficción. Es el caso del pulpo protagonista de un vídeo que se ha hecho viral en redes sociales, y que ha fascinado a miles de internautas de todo el mundo. En las imágenes, puede verse cómo este cefalópodo se posiciona entre las rocas de tal forma que su cuerpo adopta la apariencia de una cabeza de criatura marina de proporciones gigantescas, confundiendo por completo al espectador.
Aunque el disfraz pueda parecer una fantasía generada por inteligencia artificial, se trata de una muestra real del talento camaleónico de los pulpos. No solo se adaptan cromáticamente al entorno: son capaces de alterar la textura y la forma de su cuerpo para mimetizarse con lo que les rodea o incluso para simular la apariencia de otras especies, en un elaborado juego de engaño y supervivencia.
Un camuflaje de otro planeta
Las imágenes difundidas por la cuenta @pildoranews muestran a un pulpo con el cuerpo inflado y la piel cubierta por un patrón moteado azul y marrón, con una forma tan perfectamente redondeada y simétrica que asemeja una cabeza monstruosa, con ojos saltones y mirada penetrante. La escena es tan desconcertante que algunos usuarios han llegado a preguntarse si lo que veían era real o una creación digital.

La respuesta, sin embargo, es clara: sí, es real. El pulpo utiliza un mecanismo sofisticado basado en células especiales llamadas cromatóforos, que le permiten cambiar de color, y otras denominadas papilas, que modifican la textura de su piel. Gracias a ello, puede pasar de parecer una roca a convertirse en un pez plano, o como en este caso, en la parte superior de un ser marino aparentemente enorme.
Este comportamiento ha sido ampliamente documentado en especies como el pulpo mimo (Thaumoctopus mimicus), que puede imitar peces león, serpientes marinas o rayas. Aunque no se ha confirmado la especie exacta del individuo del vídeo, varios usuarios sugieren que podría estar imitando una morena gigante, una hipótesis plausible dadas las formas bulbosas y los patrones de su piel.
Reacciones de asombro y reflexión
Los comentarios en redes sociales no se han hecho esperar. Desde quienes lo comparan con «Calamardo» de Bob Esponja hasta los que expresan su deseo de tener uno como mascota, la mayoría coincide en lo mismo: la escena es sencillamente espectacular. «Me camuflaré para combatir los pingüinos rezadores», bromea un usuario entre emoticonos de risa. Otros, sin embargo, lanzan reflexiones más profundas: «Antes habría expresado mi asombro… ahora me pregunto si es real. La IA está limitando mi capacidad de asombrarme», comenta con tristeza una seguidora.
El vídeo también ha generado admiración por la inteligencia de los pulpos, reconocidos como los invertebrados más inteligentes del planeta. Su cerebro, altamente desarrollado, les permite resolver problemas complejos, abrir frascos, utilizar herramientas y planificar estrategias defensivas como esta.
Una llamada a la protección
Más allá del espectáculo visual, este tipo de fenómenos recuerdan la necesidad de proteger a estos animales y a sus hábitats. Algunos comentarios lo expresan con claridad: «Cuidémoslos, son únicos». La sobrepesca, la contaminación marina y la destrucción de arrecifes están amenazando la vida de innumerables especies, incluidos los pulpos.
Este asombroso despliegue de camuflaje, más propio de una película de ciencia ficción que del mundo natural, es un recordatorio de que aún quedan misterios por descubrir en los océanos y que estos seres increíbles merecen toda nuestra admiración… y protección.








