En Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha y Aragón los barones regionales del PSOE se volcaron con los cazadores y las urnas les han dado la victoria. Ciudadanos, por su parte, irrumpe con fuerza en la España vacía y Podemos se estrella.
29/4/2019 | Redacción JyS
Un total de 27 diputados socialistas llegarán al Congreso gracias al apoyo de los ciudadanos que viven en la España rural. Concretamente en Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha y Aragón los barones regionales se volcaron con los cazadores y las urnas les han dado la victoria. Por su parte, Ciudadanos consigue entrar con fuerza en la España vaciada –13 escaños de los 66 en disputa– y Podemos se desangra, pasando de los ocho escaños, a solo uno.
El gran beneficiado del reparto de los 66 escaños de la llamada España rural fue Ciudadanos, que se había quedado en 2016 a las puertas de conseguir representación en estas regiones. Ahora suma en las 19 provincias menos pobladas de España hasta 13 escaños. Por su parte, Podemos ha sido el gran derrotado del mundo rural el 28-A, ya que en estas regiones al conservar solo un escaño -el de Álava- cuando en las anteriores elecciones generales consiguió ocho.
Por su parte el Partido Popular -que pasa de 36 asientos en el Congreso en las regiones de la España vacía a solo 20– se ha visto lastrado por la irrupción de Vox, si bien el partido de Santiago Abascal -a pesar de su apoyo sin tapujos a la caza- se queda sin representación en las 19 provincias menos pobladas de España.
El PSOE gana en las regiones en las que sus barones regionales apoyaron la caza
El partido socialista ha pasado en Andalucía de 20 a 24 escaños, en las tres provincias menos pobladas de Castilla-La Mancha (Cuenca, Guadalajara y Albacete) de tres a cinco y en Aragón de cuatro a cinco. En estas tres comunidades autónomas, aquellas en las que sus barones regionales apoyaron la caza sin tapujos, ha sido la fuerza más votada.
El PSOE de Andalucía fue el primero en mostrar públicamente en apoyo al mundo de la caza comprometiéndose con #LaCazaTambienVota. Poco después, en una nota de prensa el PSOE-A insistió en esta idea tras las declaraciones de Teresa Ribera asegurando que prohibiría la actividad, «consciente de la importancia que tiene para la conservación del medio natural y para el desarrollo rural por su repercusión económica y social».
La segunda formación territorial socialista en ponerse en salir al paso de las declaraciones de la ministra Ribera y apoyar la caza fue la del Alto Aragón, siendo ésta más dura y exigiendo una rectificación. En palabras del Secretario General de la formación, Antonio Cosculluela, la ministra de Transición Ecológica aseguró que «está inhabilitada para hablar de desarrollo económico y medioambiental del mundo rural».
También el PSOE en Castilla-La Mancha defendió entonces la importancia económica de la caza y los puestos de trabajo que genera. En esta dirección, el presidente regional Emiliano García-Page advirtió al Gobierno central «que no admitiría recortes contra la actividad cinegética». Por su parte el secretario general del PSOE de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, subscribía a mediados de marzo el ‘Decálogo por la Caza’ planteado por la Federación Extremeña de Caza bajo la campaña #LaCazaTambiénVota y transmitía su «compromiso firme» con el sector, algo que ha hecho en repetidas ocasiones durante los últimos meses.
Ciudadanos convence en el mundo rural
La portavoz de la Ejecutiva nacional de Ciudadanos, Inés Arrimadas, defendió la caza y la pesca «como actividades para fijar población rural» durante un encuentro con los simpatizantes y afiliados del partido celebrado el pasado viernes 29 de marzo en Teruel. Además Ramiro Domínguez Bujeda, diputado en las Cortes de Aragón por la provincia esa provincia y Secretario de Organización de Ciudadanos en la citada Comunidad Autónoma, protagonizó el pasado mes de diciembre un discurso muy aplaudido ofreciendo guiños al mundo de la caza.
Podemos, sin embargo, registraba en el Congreso el año pasado una proposición de ley para modificar el Código Penal que suponía el mayor intento de prohibir la caza y la pesca registrado hasta la fecha. La misma formación solicitó al gobierno de Pedro Sánchez prohibir la caza de la becada, la tórtola y la perdiz pardilla así como la protección total del lobo ibérico y paralizar el control de predadores o la prohibición del silvestrismo. Acciones que sentaron muy mal en la España rural y que podrían haber influido en el voto de sus habitantes.