El pasado 2 de septiembre, varios agentes medioambientales de la provincia de Cuenca, junto con efectivos de la Guardia Civil, localizaron a un furtivo que operaba de noche en diversos caminos del paraje conocido como ‘El Campichuelo’, situado entre los términos municipales de Ribagorda y La Frontera.
Según informó la Benemérita, al proceder a la detención del vehículo, se comprobó que en su interior viajaban tres personas, una de ellas menor de edad. Durante el registro del coche, los agentes encontraron un rifle, un monocular térmico, munición lista para ser empleada, dos linternas de gran potencia y dos perros de raza teckel en el maletero.
La Guardia Civil incautó el arma de fuego y comunicó a las autoridades competentes las diferentes infracciones cometidas por este furtivo, recogidas en la Ley de Caza 3/2015 de Castilla-La Mancha, la Ley 7/2003 de Bienestar Animal, la Ley Orgánica 4/2015 de Protección de la Seguridad Ciudadana, el Reglamento General de Circulación y el Decreto 63/2006 de circulación de vehículos a motor en el medio natural.
El operativo se llevó a cabo tras recibir varias denuncias de vecinos de la zona que habían observado movimientos sospechosos en horas nocturnas. Los agentes medioambientales, en colaboración con la Guardia Civil, establecieron un dispositivo de vigilancia que permitió localizar y detener al furtivo.
Las autoridades involucradas en esta operación informan que durante estas próximas semanas se intensificarán las campañas de vigilancia en entornos natural debido al inicio de la berrea del ciervo, época muy atractiva para los furtivos que buscan hacerse con grandes machos al margen de la ley.
