Un hombre de de 61 años de edad vecino Valverde del Camino (Huelva) ha fallecido después de comer una seta venenosa. Se trataba de una Amanita verna, la cual confundió con un gurumelo (Amanita ponderosa), según ha desvelado su hijo mayor, Juan Diego Castilla, a los medios locales.
Según su relato, la semana pasada su padre fuera a coger setas y asó en el fuego dos de las recolectadas, pensando que eran gurumelos, y se las comió. Con el paso de los días fue sintiéndose mal y tuvo que ser ingresado en el hospital.
Aunque según su hijo su aspecto físico era bueno «los doctores nos dijeron que se estaba muriendo». Tras ello, se valoraba si su estado de salud se debía a unos fármacos que estaba tomando para tratarse una enfermedad que padecía o a la ingestión de las setas, pero esa hipótesis fue descargada.
«El cuadro fulminante de hígado que presentaba no podía haber sido causado por los fármacos en tan poco tiempo y se confirmó el envenenamiento por el consumo de una seta tóxica que le causó la muerte días después», según ha explicado el hijo al citado medio.
«Que la gente se piense muy bien lo que hace, porque no merece la pena jugársela», terminaba su intervención el hijo del fallecido.
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