La importancia económica de la caza y la pesca aumentó durante la crisis, consolidándose como un importante recurso que, sólo en licencias, llegó a ingresar hasta casi 29 millones de euros al estado anualmente.
5/9/2017 | Redacción JyS
La crisis que comenzó en 2008 en nuestro país pasó factura al número de licencias de caza y pesca expedidas. Miles de aficionados tuvieron que renunciar a practicar estas actividades por cuestiones económicos, pero esto no impidió que las arcas públicas aumentaran el dinero recaudo por esta vía. La caza y la pesca se convirtieron en una importante fuente de ingresos para el mundo rural, llegando a alcanzar los más de 28 millones de euros anuales en 2014, sólo en licencias. Cabe destacar que este es sólo uno de los gastos –y quizá el de menor costo– que los aficionados realizan cada año para poder pescar o cazar en España.
Este hecho provocó que la caza y la pesca aumentaran su importancia como recurso natural sostenible y renovable, tal y como se desprende de los datos aportados por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente – MAPAMA- en su página web. Según sus datos, pese a la caída en cuanto al número de licencias de caza y pesca expedidas, las arcas públicas aumentaron sus ingresos 6.609.580 euros: si en 2005 el aporte al Estado era de 22.039.042 euros, en 2014 se elevó a 28.648.622 euros.
Aumenta el aporte a las arcas públicas por licencias de caza y pesca en España
La gráfica anterior, basada en datos del propio MAPAMA, muestra cómo los cazadores y pescadores aportan cada vez más dinero a las arcas públicas con sus licencias, fondos que no se destinan únicamente al campo, sino que se invierten en aspectos tan necesarios como la sanidad o la educación. Además, estas cifras reflejan la importancia de la caza y la pesca como recurso económico que genera riqueza y fija población en el medio rural.