La Federación de Caza de Castilla-La Mancha ha manifestado su más absoluto rechazo a la consideración por parte del Ministerio de Transición Ecológica (Miteco) de la posible inconstitucionalidad de la modificación de la Ley de Caza de Castilla-La Mancha, que permite la colocación de puestos de montería o batida en caminos, tras la denuncia presentada por entidades ecologistas.

En un comunicado de prensa hecho público este martes, 2 de julio, la Federación considera que la medida aprobada por las Cortes Regionales de Castilla-La Mancha cumple con todas las garantías de constitucionalidad.

El organismo ha asegurado que el rechazo del Miteco se produce por la «tergiversación y manipulación que desde los promotores de la denuncia se está haciendo respecto de la finalidad de esta medida, y sobre la petición que las entidades representantes de sector cinegético hicieron en su día a los representantes de los grupos políticos que hoy constituyen las Cortes regionales».

Una medida que «ya existe desde siempre»

Ante esta situación, la Federación de Caza de Castilla-La Mancha ha querido dejar claro que la vigente Ley de Caza, y el Reglamento que la desarrolla, ya obliga a todos los organizadores de acciones colectivas de caza a señalizar con 72 horas de antelación las vías de acceso en aquellos terrenos donde se celebrará la acción de caza, así como a cortar los accesos a estas vías el mismo día de la cacería, únicamente durante el tiempo que dure la acción de caza, dejando paso libre una vez terminada la misma.

Esto quiere decir que el corte de caminos es una medida que ya existe desde siempre, cuestión que omite Ecologistas en Acción en su denuncia.

De igual modo, ha querido dejar claro que en muchas ocasiones esta señalización es desplazada, gravemente deteriorada y en no pocos casos sustraída por personas que, aparte de cometer una acción punible, «sin duda tienen intereses espurios pretendiendo inculpar por acciones de omisión a los organizadores de las cacerías».

También han recordado al respecto que, aunque previamente se haya señalizado el desarrollo de las cacerías tal y conforme previene la legislación vigente, actualmente no se permite la colocación de personas participantes en la cacería a menos de 50 metros del borde de estas vías de tránsito porque se consideran zonas de seguridad.

Una medida que prima la seguridad de todos en el campo

Este hecho, la colocación de un cazador a 50 metros del borde de las vías, puede suponer un peligro para los posibles usuarios que, aun estando señalizadas, hacen caso omiso de esta señalización, puesto que los cazadores adentrados en el monte, pueden no disponer de visibilidad clara ni suficiente a la hora de realizar el disparo.

Por tanto, el objetivo primero y principal de esta medida es la seguridad de todos los usuarios del medio natural, tanto de ciclistas, motociclistas, senderistas, como de los propios cazadores participantes en la acción de caza, que con esta medida podrán hacer el disparo en condiciones óptimas de visibilidad y podrán ubicar la situación exacta de compañeros de cacería y de otros posibles usuarios que hubieran desoído el corte del camino.

Además, la nueva reforma aprobada por el Gobierno regional permitirá que aquellas personas de edad avanzada o movilidad reducida que, de forma legítima tienen derecho a participar en una jornada de caza, puedan hacerlo en condiciones adaptadas a su situación y por supuesto con total seguridad para ellos, algo que antes no podrían realizar porque su estado no les permitía acceder a puestos colocados en el interior de la mancha y que en multitud de ocasiones coinciden con terrenos escarpados de muy difícil acceso.

También permitirá la rápida localización y acceso a los servicios de emergencia en caso de que ello fuera necesario para atender cualquier situación que pudiera producirse.

En definitiva, la reforma aprobada permite colocar puestos de caza de acciones colectivas de caza en caminos y senderos de uso público, «siempre con el permiso de la entidad titular de este tipo de vías, y única y exclusivamente durante el tiempo que dure la acción de la caza».


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La Federación ha insistido en que se está hablando de un período de tiempo de entre 5-6 horas durante un único día al año, y estando debidamente señalizado con 3 días de antelación, medida que claramente evitaría el riesgo de posibles accidentes y redundaría en la seguridad de todos los usuarios del medio natural.

Por tanto, desde la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, como representantes de los cazadores castellano-manchegos, que suponen más de 100.000 licencias de caza, y con la representación directa de más de 300 sociedades de cazadores locales, que son titulares y gestionan más de 450 cotos locales y 3 millones de hectáreas en la región, y más de 15.000 cazadores federados, han querido trasladar al Gobierno regional y a las propias Cortes regionales el agradecimiento por la modificación realizada y ha acabado mostrando su total a apoyo a esta medida.