Tanto el taxidermista que ha realizado el trabajo como el veterinario que examinó al animal tras la cacería tienen una curiosa explicación para su aspecto y tamaño.
30/5/2017 | Redacción JyS
El pasado mes de febrero te contábamos la historia de Agustín Cantarero, quien había conseguido abatir un extraño y diminuto jabalí en la Finca El Cotillo (Córdoba). En aquel momento, Cantarero expresaba su incredulidad ante el animal que había cazado. “En mi vida había visto algo similar”, aseguraba.
El jabalí, que no pesaba más de veinte kilos, presentaba unas defensas inusuales para el tamaño del cuerpo. El trofeo arrojó unas medidas de 14 centímetros de longitud de colmillos y 3,5 de amoladeras.
Ahora el cazador ya podrá contemplarlo en su salón gracias a José Luis Franco, taxidermista cordobés al que ya anunció Cantarero que lo llevaría para que lo naturalizase de cuerpo entero.
El resultado ha sido magnífico, a pesar de tener el aspecto propio de la colección de taxidermias desastrosas que ya os mostramos en ocasiones anteriores, pero es que el animal ya era así de extraño. Esta malformación, según señalaron tanto el veterinario que examinó al animal en la junta de carnes como el propio taxidermista, se debe probablemente a una desviación de la columna; si bien podría haberse tratado de un cruce como en otros casos.