En los últimos días han sido varias las bromas que algunos habitantes de la región de Hérault (Francia) han gastado a la Policía: una muñecas hinchable tomando el sol y un espantapájaros disfrazado de pescador se han vuelto virales.
Parece ser que el confinamiento no ha acabado con las ganas de gastar bromas a los franceses. En los últimos días, han sido varias las ‘bromas’ que algunos ciudadanos anónimos han querido dar a las autoridades, encargadas de vigilar que las medidas de confinamiento se cumplen.
El pasado 3 de mayo, algunos residentes de Carnon (Francia), colocaron una muñeca hinchable en la playa, tumbada sobre una esterilla y bajo una sombrilla. Vista desde lejos, parecía que se trataba de una mujer tomando el sol y saltándose las medidas de confinamiento establecidas por el COVID-19.
La policía de Hérault, movida por el engaño, rápidamente fue hacia allí para proceder a identificarla. Al llegar, se dieron cuenta de que se trataba de un engaño y, lejos de enfadarse, se lo tomaron con humor. Tanto, que compartieron el suceso en su cuenta de Twitter con el siguiente texto: «Mientras observaban las playas, los gendarmes rescataron una muñeca abandonada por su dueño».
Un espantapájaros disfrazado de pescador
El suceso de la muñeca hinchable ha servido como reclamo para que otros ciudadanos decidieran repetir ayer la broma en la playa de Cabourg. Esta vez, utilizando un espantapájaros disfrazado de pescador.
Cuando la Policía municipan vio a un hombre pescando tranquilamente en la playa, decidión intervenir. Hasta tres agentes se dirigieron hacia el pescador con el objetivo de sancionarlo.
Al ‘pescador’ no le faltaba detalle: caña de pescar, silla e incluso latas de cerveza. La trampa funcionó a la perfección y arrancó las carcajadas de las redes sociales, donde se ha vuelto viral.