El pasado viernes, 4 de febrero, una mujer de Hagen -una ciudad alemana de Renania del Norte-Westfalia, situada en la región del Ruhr- regresaba a su casa sobre las 13:20 horas del mediodía cuando se encontró la insólita imagen de un jabalí tumbado en el salón de su hogar. Al abrir la puerta, se topó con la estampa del animal -hembra- tumbada, hecho que le llevó a llamar de forma inmediata a la policía, que fue hasta el lugar para intentar expulsarla de allí.
Tras acudir al domicilio de la mujer, comprobó que el jabalí había destrozado parte del mobiliario de éste y, con la ayuda de un cazador de la zona, la policía intentó liberarlo y, no con pocas dificultades, logró que se fuese de nuevo a su hábitat.
El jabalí accedió a la vivienda a través de una puerta que se quedó abierta
Según informó la policía de Hagen, el animal probablemente llegó a la planta baja a través de una puerta del patio. Cuando la puerta se cerró de golpe, quedó atrapado. Los policías, junto con el cazador, buscaron la manera de sacar al animal, que pesaba alrededor de 60 kilos, del apartamento sin causar daños. Los agentes abrieron con cuidado la puerta principal, y la hembra de jabalí encontró su camino rápidamente de regreso a la naturaleza.
Hay que recordar que los cazadores alemanes son una herramienta al servicio de la Policía no sólo en este tipo de casos, sino también en los accidentes de tráfico. Por su conocimiento de la naturaleza y de la fauna silvestre, los cazadores son pieza clave cuando surge algún tipo de imprevisto en el monte. Ese concepto lo tienen bien aprendido los agentes de la autoridad, ya que los llaman cuando así lo requieren.