El PSOE no defenderá la caza en Europa. Así lo ha dado a conocer Manuel Gallardo, presidente de la Real Federación Española de Caza (RFEC), este jueves, 6 de junio. Lo ha hecho durante el acto de presentación de los resultados de la campaña ‘La caza vota en Europa’, el cual ha tenido lugar en la sala de juntas de la Real Federación Española de Caza, en Madrid.
En él ha estado presente Jara y Sedal, siendo testigos de cómo desde la propia RFEC han confirmado un nuevo cierre de puertas del Partido Socialista a la esfera de la caza. Según ha asegurado Gallardo, el PSOE no ha firmado dicha campaña, puesta en marcha de cara a las elecciones al Parlamento Europeo del próximo 9 de junio.
El único objetivo planteado con la misma es el de recordar a los partidos políticos la trascendencia de la caza en España y cómo la legislación europea es clave para su futuro. Pese a que desde la RFEC han querido hacer partícipes a todas las formaciones españolas, los socialistas finalmente han decidido no formar parte de ello.
La anticaza Teresa Ribera, a la cabeza de la lista del PSOE en Europa
Esta postura del PSOE no sorprende si tenemos en cuenta quién es su cabeza de lista. La anticaza Teresa Ribera, vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica en el Gobierno de España ha sido elegida por el PSOE para liderar su candidatura de cara a las elecciones al Parlamento Europeo.
Si nos trasladamos al año 2018, la ministra reconoció públicamente, en una entrevista a Onda Cero, que no era «muy partidaria ni de los toros ni de la caza», llegando a afirmar que los prohibiría si pudiera.
Asimismo, poco después de coger la cartera ministerial en ese mismo año, Ribera dejó claro su posicionamiento del lado del animalismo y mantuvo reuniones con los grupos ecologistas. Estos colectivos le entregaron una hoja de ruta para cargar contra la caza.
De entre los asuntos que estos plantearon cabe mencionar, por ejemplo, la prohibición de la munición de plomo, la modificación del Código Penal para tipificar el delito de maltrato a los animales salvajes, una subida de impuestos a los cazadores y la prohibición de la caza del lobo.
El PSOE traslada a la RFEC su compromiso en la presente legislatura con la caza sostenible
Continuando con esa lista, Ribera prohibió la caza de la tórtola y el aprovechamiento cinegético en Parques Nacionales. En cuanto a otros objetivos que todavía tiene pendientes en su agenda, peligra la caza de la codorniz, que de momento no ha podido hacer efectiva al encontrarse frente a las evidencias científicas presentadas por los cazadores.
A estas acciones de tono indudablemente anticaza hay que sumar también algo más reciente como la aprobación de la Ley Animalista y la reforma del Código Penal. Lo cierto es que ambas fueron atribuidas a Unidas Podemos en la anterior legislatura, pero contaron con el apoyo total de Teresa Ribera.
PP y VOX sí se comprometen con los cazadores
La Real Federación Española de Caza (RFEC) ha aprovechado el evento para hacer un llamamiento a todos los cazadores españoles para que acudan a la cita de este domingo 9 de junio, unas elecciones al Parlamento Europeo.
Manuel Gallardo ha recordado que tanto el Partido Popular como VOX han suscrito todas las medidas del decálogo «La Caza Vota en Europa», comprometiéndose de esta forma a trabajar con los cazadores españoles en los próximos cinco años.
El presidente federativo, Manuel Gallardo ha agradecido al PP y VOX su compromiso con el sector al suscribir todas las medidas propuestas por la RFEC y ha incidido en la importancia que tienen estos comicios para los cazadores españoles, al decidirse en Europa cuestiones fundamentales como «la vuelta del silvestrismo, la caza sostenible de la tórtola y otras migratorias, el uso del plomo en municiones o distintos reglamentos de bienestar animal que podrían acabar con las rehalas».
Gallardo ha lamentado que el PSOE no haya querido comprometerse con la caza, al ser un partido «con el que llevamos mucho tiempo trabajando a nivel nacional y autonómico», por lo que valora este cambio de posicionamiento como una «estrategia electoral errónea de acercarse al ecologismo más radical, que por otro lado ya preveíamos al llevar de cabeza de lista a Teresa Ribera, una ministra que ya manifestó que prohibiría la caza».