Con el inicio de la media veda, muchos cazadores se preguntan qué hacer con sus armas si deciden parar en un restaurante o bar al acudir o regresar de una jornada de caza. La Federación Andaluza de Caza (FAC) ha emitido una circular para aclarar estas dudas y evitar así posibles sanciones.
Según el Reglamento de Armas y la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, portar armas de fuego o de cualquier clase en un establecimiento público sin necesidad es una infracción grave. Esta conducta puede ser sancionada con una multa mínima de 600 euros y, probablemente, conllevará la retirada y/o revocación de la licencia de armas por un mínimo de dos años. La necesidad de portar las armas queda a criterio de los agentes de la autoridad.
Recomendaciones de la FAC
Cuando un grupo de cazadores decide parar en un establecimiento hostelero antes o después de la jornada de caza, es crucial seguir ciertas recomendaciones para evitar sanciones:
- Dejar las armas en el vehículo: Las armas deben permanecer en sus fundas dentro del maletero del vehículo.
- Vigilancia continua: Las armas deben estar bajo la vigilancia directa, presencial y continua de una persona mayor de edad. Esta persona debe ser capaz de detectar y advertir cualquier intento de sustracción de las armas de caza.
Importancia de la vigilancia
El criterio de los agentes de la autoridad y de la Delegación del Gobierno es cada vez más exigente y restrictivo en estos casos. Las situaciones en las que los delincuentes aprovechan para sustraer armas de origen legal son comunes, y estas armas suelen ser comercializadas ilegalmente para su uso en actos delictivos. Por ello, es fundamental ser muy escrupulosos con la custodia de las armas durante las paradas en el trayecto de ida y vuelta al cazadero.
Conclusión
Para evitar problemas legales, es esencial no entrar en el establecimiento hostelero con el arma, aunque esté enfundada y desmontada. Los agentes de la autoridad pueden considerar que no está justificado y es innecesario portar el arma en un establecimiento público, lo que podría resultar en una denuncia e incluso en la intervención del arma.
La Federación Andaluza de Caza insta a todos los cazadores a seguir estas recomendaciones para garantizar la seguridad y evitar sanciones. La diligencia en la custodia de las armas no solo protege a los cazadores de posibles sanciones, sino que también contribuye a la seguridad pública al prevenir el uso indebido de armas de fuego.
