La peste porcina africana (PPA) es una enfermedad viral altamente contagiosa que afecta tanto a los cerdos domésticos como a los jabalíes. Causada por un virus de la familia Asfarviridae, esta enfermedad se caracteriza por una alta tasa de mortalidad en los animales infectados y su transmisión, principalmente por contacto directo con animales infectados o con secreciones como la saliva, la orina o las heces, genera numerosas dudas.
Además de la transmisión directa, la PPA puede propagarse a través de vectores como los insectos, el contacto con material contaminado como ropa o vehículos, o la ingesta de carne infectada. Debido a su gran propagación en los últimos años, científicos de todo el mundo tratan de conocer cuál es su patrón a la hora de infectar nuevos huéspedes y si la densidad de sus poblaciones afecta en su avance.
Ante esta situación, la Unión Europea ha implementado una serie de medidas coordinadas para prevenir la propagación de la PPA que se centran en tres ejes principales: medidas de bioseguridad y gestión de residuos; el control de la población del jabalí a través de la caza y la instalación de cercados sanitarios; y la vigilancia epidemiológica intensificada.
Científicos estudian en Italia cómo afecta la densidad de jabalíes en la transmisión de la PPA
En relación con la vigilancia epidemiológica, el Observatorio Europeo de Vida Silvestre (EOW), creado en 2021 como parte del proyecto ENETWILD, estableció un sistema de vigilancia homogéneo de fauna salvaje en el continente. Su finalidad es recopilar datos que ayuden a la gestión de poblaciones y a la evaluación de riesgos sanitarios de especies como el zorro, el corzo y el jabalí. En el estudio ‘Generating wildlife density data across Europe in the framework of the European Observatory of Wildlife’ se utilizó un protocolo estandarizado basado en cámaras trampa y el modelo de encuentros aleatorios (REM). En 2023, el EOW desplegó 1.722 cámaras trampa en 44 sitios distribuidos en 22 países, lo que se tradujo en un total de 79.092 capturas. El jabalí fue detectado en 40 de los 44 sitios de monitorización, siendo la especie más registrada en los estudios de ese año. Este resultado subrayó la importancia de controlar su densidad, al ser un foco importante para la transmisión de la PPA.
Por su parte un estudio publicado el pasado 18 de noviembre por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, exploró la relación entre la densidad de poblaciones de jabalíes y la dinámica de transmisión de la PPA en el norte de Italia.
La peste porcina avanza en Europa y la FAC alerta: hay que aplicar la emergencia cinegética del jabalí
Para proporcionar estimaciones cuantitativas de la influencia de la densidad de jabalíes en la propagación de la PPA, el estudio desarrolló un modelo de detección explícito con el fin de relacionar la densidad de las poblaciones de jabalí con sus hábitat con notable densidad detectada. Este modelo tuvo en cuenta los datos epidémicos observados en el norte de Italia desde enero de 2022 hasta septiembre de 2023. Otras estimaciones de densidad de jabalíes fueron generadas por el consorcio ENETWILD y los períodos infecciosos y otras tasas a tener en cuenta se estimaron directamente a partir de los datos de vigilancia. Posteriormente se construyeron ocho modelos en cuanto al modo en el que se transmite la PPA.
El modelo que mejor se ajustaba a los datos completos utilizó una tasa de transmisión estacional, pero no respaldó un efecto de la densidad de jabalíes en la propagación de la PPA a lo largo de todo el período de estudio. Sin embargo, análisis adicionales de los resultados sugieren que la densidad de jabalíes probablemente jugó un papel en la configuración de los patrones de transmisión de la PPA solo durante la segunda ola (octubre de 2022 – septiembre de 2023). Esta observación podría deberse a una falta de potencia en la primera ola, tasas de vigilancia más bajas en ese período o a estimaciones de densidad que ya no reflejaban las verdaderas distribuciones de densidad de jabalíes al comienzo de la segunda ola.
Los expertos aseguran que la sobrepoblación afecta en la transmisión de la PPA pero piden más estudios
Los resultados demuestran que «la densidad de jabalíes afectó a la propagación de la PPA en el norte de Italia» si bien «una investigación más a fondo mediante la estimación de parámetros para olas epidémicas individuales podría ser beneficiosa» para caracterizar mejor el impacto específico de la PPA y su relación con la densidad de jabalíes.
Según los expertos, el modelo desarrollado aquí podría utilizarse en otros contextos para evaluar si la influencia de la densidad de jabalíes está presente en distintos escenarios epidémicos.
Por su parte, la Organización Mundial de Salud Animal advierte en un extenso trabajo sobre la PPA que las estimaciones del tamaño y la densidad de la población de jabalíes son en muchas ocasiones imprecisas. Esto, junto con la falta de conocimiento de los principales parámetros epidemiológicos del ciclo de transmisión, impiden cualquier estimación de una posible densidad mínima a partir de la cual desparezca la infección, y del tamaño crítico de la comunidad de jabalíes necesario para modular la dinámica de la enfermedad.
Incremento alarmante en Europa
Aunque como su propio nombre indica, la PPA es originaria de África, se ha extendido a otras regiones del mundo, incluyendo Asia, América del Sur y Europa. El continente europeo experimentó un incremento significativo en la incidencia de la PPA en 2023 con un total de 14 estados miembros afectados. En el caso de los cerdos, se quintuplicaron los brotes con respecto al año anterior y en los jabalíes, se observó un aumento del 10%. Durante 2023 tuvo lugar la introducción del virus en Suecia y Croacia, su expansión a nuevas áreas de Italia y la reapareció en Grecia tras un período de dos años sin casos. El año pasado se posicionó como el de mayor influencia desde 2014.
Aunque España se encuentra libre de la enfermedad desde 1995, la reciente propagación de esta patología en la Unión Europea, con particular incidencia en Italia, ha elevado significativamente el nivel de alerta en el sector porcino nacional. La posibilidad de una introducción del virus en el territorio nacional podría tener consecuencias devastadoras desde el punto de vista económico. La falta de una vacuna y la facilidad de contagio de la enfermedad representan una grave amenaza para el sector cárnico. Un brote, por mínimo que sea, podría provocar el cierre de mercados internacionales que son en la actualidad los principales importadores.
El jabalí, la gran preocupación
«El cerdo doméstico, el de las granjas, lo tenemos totalmente controlado y protegido frente a las enfermedades, pero el jabalí no. (…) Lo que nos preocupa más es el movimiento de los jabalíes, y es que en la Unión Europea la enfermedad se está trasladando a través de ellos», señaló Miguel Ángel Higuera, veterinario y director de la Asociación Nacional de Productores de Ganado Porcino.
En relación con la afirmación de Higuera, un reciente estudio de VetBioNet y cuyos resultados fueron publicados en Animal’s Health demostró que los jabalíes «son más susceptibles al virus de la PPA que los cerdos domésticos. Los jabalíes mostraron períodos de incubación más cortos, aparición más temprana de signos clínicos e hipertermia y desarrollo más rápido de lesiones hemorrágicas graves y extensas».