La presencia de fauna salvaje en las carreteras españolas continúa generando sustos y daños materiales de consideración. El último suceso tuvo lugar hace unos días en la provincia de Burgos, donde un vehículo acabó envuelto en llamas tras impactar contra un jabalí en plena autovía del Norte. Milagrosamente, sus tres ocupantes resultaron ilesos, aunque el vehículo quedó completamente calcinado. La rápida intervención de los bomberos de Lerma evitó que el fuego se propagara por el monte cercano.
Los hechos ocurrieron en torno a las 22:50 horas del pasado miércoles, cuando una llamada al 112 alertaba de un accidente en el kilómetro 208 de la A-1, en dirección Burgos. Según informaba el alertante, el coche acababa de atropellar a un jabalí y había comenzado a arder. Las llamas se extendieron rápidamente desde el motor hasta calcinar por completo el turismo, alcanzando incluso la vegetación de la cuneta.
Una intervención clave para evitar un desastre
Hasta el lugar del suceso se desplazaron los bomberos voluntarios de Lerma, quienes actuaron con rapidez para controlar el incendio. Gracias a su eficaz intervención, el fuego quedó extinguido pasadas las doce y media de la noche, sin que llegara a afectar a la masa forestal del entorno.
La imagen que encontraron los equipos de emergencia al llegar a la zona era impactante: el coche envuelto en llamas y la cuneta prendida en varios puntos. Por suerte, los tres ocupantes —un hombre, una mujer y una menor— habían conseguido salir por su propio pie y se encontraban en buen estado.

Una escena cada vez más habitual en las carreteras
Los accidentes provocados por jabalíes son cada vez más frecuentes en muchas zonas de España, especialmente en provincias con alta densidad de esta especie. El crecimiento descontrolado de sus poblaciones, unido a su expansión hacia zonas periurbanas y carreteras, ha incrementado notablemente los riesgos de colisiones.
En este caso, el siniestro podría haber terminado en tragedia. Afortunadamente, todo quedó en un gran susto. La Guardia Civil de Tráfico de Burgos también se desplazó al lugar para coordinar la seguridad y regular el tráfico, mientras los servicios de emergencia trabajaban en la zona.
Este nuevo suceso pone de manifiesto la necesidad de mejorar la gestión de la fauna salvaje y reforzar la seguridad en las vías de comunicación que atraviesan hábitats frecuentados por jabalíes.








