Esta misma tarde, el servicio regional de caza y pesca de Castilla-La Mancha ha enviado un mensaje a todos los teléfonos móviles de los cazadores con licencia en la región. El objetivo de este SMS es advertirles sobre la enfermedad de Aujeszky, que puede afectar a perros de caza y rehalas, y proporcionar información detallada sobre su transmisión, síntomas y las medidas a tomar ante un posible caso.
La enfermedad de Aujeszky, también conocida como pseudorrabia, es una enfermedad infectocontagiosa producida por un herpesvirus que afecta a un gran número de especies. Sin embargo, tiene mayor relevancia en el cerdo y el jabalí, que son los hospedadores y reservorios naturales del virus. En los perros, la enfermedad se presenta con un cuadro clínico grave.
El virus de Aujeszky permanece en el cerdo o jabalí en estado de latencia hasta que, por estrés del animal, comienza nuevamente la replicación, volviéndose infeccioso para otros animales que convivan con él. Los jabalíes se infectan por contacto con otros jabalíes enfermos, mientras que los perros se infectan por contacto directo con jabalíes infectados, especialmente a través de mordeduras y el consumo de carne cruda o vísceras durante la caza. Por esta razón, los perros de rehala son especialmente susceptibles a la infección.
Los síntomas en perros aparecen entre 2 y 6 días después de la infección e incluyen vómitos, diarreas, inapetencia, dificultad para respirar, nerviosismo, picores y rascado compulsivo, aullidos, alteraciones del comportamiento y neurológicas. Un síntoma característico es el prurito o picor repentino y muy intenso, imposible de controlar y localizado en el lugar donde penetró el virus, normalmente en un lado de la cara. La muerte suele ocurrir en menos de 24 horas desde la aparición de los primeros síntomas.
Para prevenir la enfermedad, se recomienda evitar el acceso de los perros a carne y vísceras de los animales cazados. Es importante vigilar que los perros no coman de las piezas cazadas y no dar restos de esta carne u órganos a los animales durante el despiece de la canal. Además, es crucial reconocer la sintomatología de la enfermedad para su comunicación inmediata. Los animales sospechosos deben mantenerse en observación separados del resto, asegurando su bienestar, mientras se espera que el veterinario oficial establezca las actuaciones a llevar a cabo.
En caso de observar perros con alguno o varios de los síntomas durante las cacerías, el veterinario clínico deberá ponerse en contacto inmediatamente con los Servicios Veterinarios Oficiales. Cabe destacar que en España no hay vacunas inactivadas autorizadas para prevenir la enfermedad de Aujeszky en perros.
Para comunicar cualquier sospecha o realizar una consulta, los cazadores pueden llamar al número 682 227 567 o enviar un correo electrónico a [email protected]
La alerta emitida por el servicio regional de caza y pesca de Castilla-La Mancha subraya la importancia de la prevención y la rápida actuación ante posibles casos de la enfermedad de Aujeszky, protegiendo así la salud de los perros de caza y rehalas en la región.