El lanzamiento de la Beretta AX 800 Suprema marca un paso destacado en el catálogo de la marca. La compañía italiana, con décadas de experiencia en el desarrollo de armas para la caza y el tiro deportivo, introduce ahora una semiautomática que combina mejoras mecánicas, reducción de retroceso y un diseño orientado a quienes buscan un rendimiento estable en jornadas largas y complicadas.
El modelo llega con un enfoque claro: aportar más comodidad y control. No se trata solo de una actualización estética, sino de un replanteamiento técnico que afecta al sistema de gas, a los cañones y a diversos elementos del arma destinados a personalizar el ajuste al tirador. Todo ello se refleja en soluciones específicas para disparos rápidos, clave en escenarios donde la reacción marca la diferencia.
La marca destaca que esta escopeta está pensada para responder bien en condiciones adversas. Desde la carcasa de polímero preparada para poder colocar elementos ópticos hasta las empuñaduras intercambiables, cada elemento está diseñado para aportar consistencia y facilitar su manejo en distintos terrenos.
Un sistema de gas más rápido y estable
Uno de los elementos más relevantes de la AX 800 Suprema es el sistema de repetición de gas B-Link Pro, que según Beretta logra «el ciclo más rápido y más limpio en un 46 %». Este punto permite acelerar la recarga y mantener la regularidad en el disparo incluso tras largas sesiones.
Junto a este mecanismo renovado, el arma incorpora un botón de liberación del cerrojo ampliado y un elevador extendido, soluciones pensadas para facilitar el uso con guantes o en condiciones meteorológicas complicadas. El conjunto se completa con un gatillo rediseñado que busca ofrecer un tiro más nítido y una recarga más rápida.
Reducción de retroceso y cañones de competición
La AX 800 Suprema integra el sistema Kick-Off Pro, que reduce el retroceso hasta un 70 %. Es un elemento habitual en modelos de gama alta, pero aquí se combina con la posibilidad de ajustar la longitud del arma, la curvatura o el desvío para adaptarse a cada usuario.
El arma llega además con cañones Steelium Pro, empleados por primera vez en una escopeta de caza. Este tipo de cañón procede de la Beretta DT11, utilizada en tiro al plato y presente en 33 podios olímpicos, incluidos 14 de las 15 medallas obtenidas en París 2024. La compañía apunta a que esta tecnología aporta trayectorias más limpias y mayor estabilidad del disparo.
Versiones y accesorios disponibles
El catálogo incluye varias configuraciones, desde acabados camo MAX-7 hasta modelos en tonos Green, Otter o Peat, además de accesorios específicos como carrilleras intercambiables o chokes Optimachoke HP. La escopeta se ofrece en cañones de 66, 71 y 76 centímetros, todos compatibles con el sistema B-Lok de cierre rápido.
