Arturo Vittori, arquitecto italiano, ha ideado lo que se conoce como Warka Water. Consiste en una innovadora estructura, en forma de torre, que ha sido diseñada para recolectar agua potable de la atmósfera en zonas donde el acceso a agua limpia es limitado.
Junto con su equipo, Vittori apostó por esto con el fin de dar una solución sostenible y de bajo coste para comunidades rurales en regiones áridas, sobre todo algunas ubicadas en África. En esos territorios, Warka Water podrá utilizarse para capturar la humedad de la lluvia, la niebla y el rocío para, así, dirigirla a un tanque de retención higiénica.
Un invento para los vecinos
Lo cierto es que esta novedad ha sido pensada para que la monten y la operen los propios aldeanos, algo que hará mucho más sencillo el éxito del proyecto. Esta torre de la que hablamos no solo es capaz de proporcionar un recurso fundamental para la vida, como es el agua, sino que también puede crear un lugar social para la comunidad.
En concreto, esta creación presenta una altura de 10 metros y una anchura de 4,2 metros. Gracias a ello, puede recolectar hasta 99 litros de agua potable al día. Es un sistema inspirado en un tipo de árbol etíope llamado ‘Warka’, el cual ofrece sombra y refugio. Su estructura es la de una torre alta, ligera y fácil de ensamblar, construida a base de materiales locales y biodegradables, tales como el bambú, la malla de nylon o el polipropileno.
En cuanto al funcionamiento del Warka Water, este consiste en aprovechar la condensación del aire húmero, capturando el agua del ambiente, y, posteriormente, almacenarla en un depósito que tiene situado en la base.
El ingenioso invento usado por un cazador para alimentar a las perdices de su coto
Por las noches, la temperatura del ambiente baja y la humedad relativa del aire sube. Entonces, la malla colocada dentro de la torre atrapa las gotas de agua que se condensan de la atmósfera, que se deslizan por la misma y quedan recogidas en ese depósito de la base para que se use como agua potable.
Por este motivo, Warka Water no necesita electricidad para funcionar y es una tecnología especialmente útil en esas zonas del mundo en el que no tienen acceso a agua corriente y donde las lluvias son escasas, pero la humedad del aire es suficiente.
Sabiendo todo esto, es digno de destacar que, además de luchar contra la escasez de agua, este proyecto también es de gran ayuda para mejorar la salud y las condiciones de vida de quienes lo usan. Esto se debe, entre otras razones, a que disminuye la necesidad de recorrer largas distancias para buscar agua y, asimismo, reduce el riesgo de contraer enfermedades por el agua contaminada.
