Una pescadora consigue meter en su barco con una maniobra maestra este enorme atún rojo
Es algo visto en muy pocas ocasiones antes lo que ha ocurrido en La Manga, en Murcia. El pasado miércoles, 30 de septiembre, en la playa de Veneziola apareció un ejemplar de atún muerto que había llegado hasta la zona. Ante esto, los bañistas que lo vieron comenzaron a hacer un corro que rodeaba al animal.
Lo que pasó después es absolutamente sorprendente. El pescado no salió del tumulto entero y esto se explica porque algunos de los allí presentes decidieron despiezarlo y llevarse partes del lomo para comérselo al llegar a casa.
Un atún de más de metro y medio
Las dimensiones del atún permitían repartirlo entre varios de ellos. En concreto, este presentaba una medida de más de un metro y medio de longitud y decenas de kilos de peso. Apareció a, aproximadamente, 50 metros de la costa y, acto seguido, fue arrastrado hasta la arena de la playa.
Mientras quedaba a la espera de que lo retiraran, los bañistas aprovecharon el momento para comenzar a llevárselos ellos mismos a trozos en un ronqueo improvisado y probablemente peligroso para la salud de las personas que pretendían consumirlo.
El peligro de la histamina en pescados muertos
Comer este atún o cualquier otro pescado que aparezca muerto en una playa supone asumir ciertos riesgos. Estos pueden tener altos niveles de histamina. De hecho, en ejemplares como las sardinas, la caballa o el propio atún, cuando están sin vida, las bacterias que transforman el aminoácido histidina en histamina prolifera.
La histamina, por su parte, es una sustancia que puede llegar a provoca reacciones alérgicas e inflamatorias en los seres humanos. Algunos de los síntomas, los cuales aparecen a las dos horas del consumo de la carne de estos pescados, pueden ser picor en la lengua, enrojecimiento del cuello y la cara, urticaria en las palmas de las manos, orejas y cabeza, dolor de cabeza y, a veces, dolor abdominal, diarrea y náuseas.