Un hombre de 53 años ha sido acusado de destruir parte importante de un antiguo asentamiento arqueológico en La Rioja. Según la Guardia Civil, el vecino de Aldeanueva de Ebro causó daños irreparables en el yacimiento romano «La Torrecilla» mientras preparaba el terreno para plantar viñedos.

La roturación de la tierra y la instalación de un sistema de riego en varias parcelas del polígono 47 de Calahorra, destruyeron numerosos fragmentos de cerámica, ladrillos y otros materiales de la época romana. Resulta relevante señalar, sin embargo, que pese a que la presencia de vestigios arqueológicos era un hecho conocido desde hace décadas, el yacimiento carecía de señalización que lo delimitara.

Podría suponer pena de cárcel

Independientemente de la falta de señales en «La Torrecilla», agentes de la Guardia Civil mantienen que «las obras realizadas por el implicado han alterado y deteriorado gravemente el yacimiento, lo que se considera un daño, lesión o menoscabo al Patrimonio Arqueológico. Este impacto se agrava al haberse llevado a cabo dentro de una zona delimitada como Bien de Interés Cultural (BIC), con la consecuente pérdida irreparable de información histórica sobre materiales que pudieron formar parte de diversas estructuras de la época romana».

Hasta el lugar se desplazaron expertos en arqueología para llevar a cabo una peritación detallada, tras la cual confirmaron que se habían producido severos deterioros en un gran número de piezas cerámicas.

Según se establece en el artículo 323 del Código Penal «será castigado con la pena de prisión de seis meses a tres años o multa de doce a veinticuatro meses el que cause daños en bienes de valor histórico, artístico, científico, cultural o monumental, o en yacimientos arqueológicos, terrestres o subacuáticos». Con la misma pena se castigarán los actos de expolio en estos últimos.

Sin los permisos necesarios

Según las investigaciones de la Guardia Civil, el hombre carecía de la habilitación legal para realizar dichas obras que debían, además, haber sido emitidas por el Ayuntamiento de Calahorra y la Consejería de Cultura del Gobierno de La Rioja.


Un agricultor labra en su tierra un bonito mensaje de ánimo a los afectados por la DANA


Ante esta situación, se activó el protocolo de notificación a través del Servicio de Conservación y Promoción del Patrimonio Histórico Artístico, a la Dirección General de Cultura, autoridad competente en materia de patrimonio histórico.

La administración se encargará de realizar prospecciones arqueológicas para determinar con exactitud qué porcentaje del yacimiento ha sido destruido para evaluar el impacto económico y cultural frente al que tendrá que responder el investigado.

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