La temporada del Capreolus capreolus comenzó ayer en nuestro país. Muchos cazadores salieron al monte para tratar de dar con ese corzo de sus sueños que, en muchos casos, ya tenían localizado. Es el caso del tremendo ejemplar que abatió un cazador en compañía de Carlos Merello, -de la empresa Spainoutfitterss-. Sus fotografías han corrido como la pólvora entre los teléfonos móviles de miles de cazadores después de que este las subiera a su cuenta de Instagram.

Jara y Sedal se ha puesto en contacto con el orgánico, quien ha preferido mantener la discreción y no revelar el lugar en el que ha sido cazado. Aún así, confiesa que no era la primera vez que se cruzaba en su camino: «Era un viejo conocido que hice bien en respetarlo el año pasado. Eso sí… casi me da un infarto cuando lo he visto este año», afirmaba en tono gracioso a este medio Merello.

Un trofeo de corzo ‘perfecto’

El trofeo del corzo es ‘perfecto’, si es que este término se puede emplear para describir al Capreolus capreolus. Por una parte es bastante simétrico, lo que significa que sus dos cuernas tienen casi la misma forma. Por otro lado tiene una buena longitud, que Carlos Merello no ha podido precisarnos. Además, también es curioso el tamaño de las luchaderas, especialmente la de la izquierda, que hace una especie de forma de gancho hacia adentro muy bonita.

Otra de las peculiaridades de este monstruo es la forma del propio trofeo, que no es recto como suele ser habitual sino que tiene una forma de corazón, lo que realza su estética. El perlado también le otorga una gran belleza y el diámetro de su roseta, cuyas dimensiones no hemos podido precisar, también indican que nos encontramos ante un trofeo de corzo extraordinario.

El arranque de la temporada de caza del corzo deja a miles de cazadores atrapados por las restricciones

Macho de corzo. © Shutterstock
Macho de corzo. © Shutterstock

Este 1 de abril ha comenzado la temporada del corzo. Se trata de una de las fechas más esperadas por los aficionados a su caza, puesto que pone fin al parón cinegético que impone el cierre de la temporada general en febrero. Además, abre la puerta a la caza de una de las especies más mágicas de nuestros montes. Pero este año, la mayoría de los cazadores que tengan sus cotos en otra comunidad tendrán que esperar para acudir a ellos, ya que las restricciones establecidas por las comunidades autónomas se lo impiden. Estos son los casos específicos comunidad por comunidad.