Hace unos meses tuvo lugar la época de la caza de la perdiz roja (Alectoris rufa) con reclamo. Fueron entonces muchos los cazadores que se echaron al monte con su macho y su jaula dispuestos a practicar una modalidad cinegética milenaria, pero hay que recordar que aunque este tipo de caza dure tan sólo unas semanas, la pasión por ella debe hacerse valer durante todo el año, como el siguiente protagonista en Jara y Sedal atestigua.
En la primavera del año 2020 se puso un reto: criar como nunca antes había conseguido nadie a un macho de perdiz. Para ello incluso se propuso que ésta durmiese con él, estrechando así la relación entre el ave y el humano hasta tal punto que la primera tomase como padre al segundo… ¡y lo ha conseguido!
Periódicamente, el cazador ha ido subiendo a las redes sociales vídeos de cómo ha ido amaestrando al precioso macho de perdiz -que incluso tiene parte de la pechuga blanca- hasta conseguir un genial canto que ha enamorado a miles de amantes del reclamo. Él se llama Salvador Sánchez, vive en Valencia capital, tiene una granja de selección genética de la perdiz a las afueras de la ciudad y este viernes narra para este medio todos los detalles de cómo ha conseguido que este ejemplar, de nombre ‘Tako’, cante de esta forma.
«Llevo muchos años criando perdices y el proceso de criar un perdigón como si el cazador fuese su madre era algo que tenía en la cabeza, pero me faltaba tiempo para dedicarle al proyecto», comienza explicando. Ese tiempo lo tuvo con la llegada de la pandemia: «En la primavera del año pasado me propuse hacerlo con una de las perdices que iban a nacer, y la verdad que ha resultado todo un éxito» a tenor de los vídeos que publica en sus redes sociales.
Así crio, paso a paso, al macho de perdiz
El cazador, cuando nació el pollo en la incubadora y tras necesitar el calor artificial de 35 a 37 grados durante unos días, se lo llevó posteriormente a su casa: «Por la noche, dejaba al perdigón a oscuras y con calor, pero no me lo podía llevar a casa por las dimensiones de la incubadora. Cuando llegaba por la mañana, cogía al perdigón, lo sacaba al sol y comía de mi mano: le iba echando pienso, hormiguillas, gusanos de los pájaros… y relacionaba mi mano con su madre», detalla Sánchez.
La clave del vínculo fue que este cazador, a mediodía, se lo llevaba a casa en una caja; después de comer, él se echaba encima al pájaro para dormir la siesta en el sofá. «Eso creó un vínculo especial entre ambos hasta tal punto que, cuando me iba de casa, venía detrás de mí hasta el coche…», narra Salvador. También es importante la ‘casta’ del animal, como así señala el criador: «Podría haber enseñado a otra perdiz que no llevase dentro ese carácter y no hubiese tenido el éxito de ésta», asegura.
Este es el genial canto de un reclamo de perdiz con la pechuga blanca
El cazador murciano José María Gázquez López ha conseguido el sueño que muchos amantes de la caza de perdiz con reclamo sueñan: criar un macho de perdiz con la corbata blanca. El vídeo de este animal, que hace tan sólo unos meses que lo metió en la jaula por vez primera y todavía no ha tenido la oportunidad de sacar al campo, ha enamorado a los cientos de cazadores que ya han podido ver la grabación. Esta es.