En el corazón de la comarca de Sierra Mágina, una espectacular finca de caza ha salido a la venta, ofreciendo a los aficionados y amantes de la naturaleza la oportunidad de poseer un trozo del paraíso cinegético. Con una extensión de 560 hectáreas, esta propiedad no es solo un terreno, sino una invitación a vivir una experiencia única.
La dehesa, que se extiende desde los 500 metros sobre el nivel del mar en la ribera del río Guadalbullón hasta los 1.300 metros en su punto más alto, es un mosaico de paisajes y hábitats que cautiva a primera vista. Los pastos verdes salpicados de encinas centenarias son el hogar de una fauna diversa, donde especies como el jabalí, el ciervo, el muflón y la cabra montés ofrecen una oferta cinegética de primer nivel.
Caza menor y mayor
La finca forma parte de un exclusivo coto privado de caza mayor y menor, donde la perdiz roja autóctona complementa la rica oferta de caza mayor. Además, el hábitat natural acoge otras muchas joyas de la vida silvestre, como gatos monteses y una impresionante variedad de aves rapaces, incluyendo azores, búhos y águilas.
Más allá de la caza, la finca está equipada con instalaciones ganaderas de primer nivel, incluyendo naves de más de 2.000 metros cuadrados y 18 abrevaderos, servidos por tres grandes depósitos de agua, asegurando el bienestar de los animales y la sostenibilidad de las actividades agrícolas.
La joya de la corona es, sin duda, la parte residencial de la finca. La casa principal, con 300 metros cuadrados de confort y elegancia, junto con la casa del guardés, se sitúan en la parte más alta, ofreciendo vistas panorámicas que son un verdadero espectáculo para la vista. Estas residencias son el refugio perfecto después de un día en el campo o simplemente para disfrutar de la tranquilidad y belleza del entorno.
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