En un impresionante acto de solidaridad, la comunidad rural se ha unido para apoyar a uno de los suyos. Javier Muro, un ganadero de 36 años del pequeño municipio de Lumbreras de Cameros en La Rioja, que se convirtió principios de año en el rostro de la lucha por la España vaciada.

El pasado 6 de febrero, durante una manifestación en defensa de los derechos de los trabajadores del campo, Javier fue detenido. La protesta, que buscaba llamar la atención sobre las dificultades que enfrenta el sector agrario, terminó en un incidente desafortunado para este joven ganadero. La Fiscalía no tardó en actuar, solicitando para él una pena de tres años y nueve meses de prisión, además de una multa económica significativa.

La comunidad rural se vuelca con el ganadero

Ante la perspectiva de un juicio costoso y la posibilidad de una condena severa, Javier hizo un llamamiento a la gente del campo para recaudar fondos. Necesitaba 10.000 euros para cubrir los gastos legales, incluyendo los honorarios del abogado, el procurador y la Responsabilidad Civil. La respuesta fue abrumadora. En un gesto de apoyo y confianza, cientos de personas contribuyeron con un total de 258 donativos, recaudando 10.871 euros.

El incidente que llevó a su detención ocurrió mientras Javier participaba en una tractorada en Logroño, donde su tarea era dirigir a los vehículos agrícolas en la ruta establecida. Un «malentendido verbal» con la Policía Municipal resultó en su arresto por parte de cinco agentes, un incidente llevado a cabo según sus palabras «de muy malas maneras».

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La historia de Javier Muro es un testimonio de la fuerza de la España rural y el poder de la solidaridad. A pesar del difícil momento que enfrentó, la generosidad y el apoyo de la gente han permitido que se cubran los costes del juicio.

La tractorada, más que una simple manifestación, se ha convertido ahora en un símbolo de resistencia y unidad. La detención de Javier y la posterior movilización para su apoyo demuestran que, incluso en los momentos más difíciles, nuestro mundo rural está dispuesto a defender a los suyos, cueste lo que cueste.