Podemos decir que, en los últimos años, el mundo de Internet y las redes sociales ha sido de gran ayuda para mantener a la sociedad conectada. Con esta herramienta no importan las diferencias espaciales o temporales. Resulta una forma muy útil de compartir trucos con personas que tienen intereses en común y este peculiar y sencillo invento para regar por goteo es uno de ellos.
En lo que se refiere a la esfera del mundo rural y de la agricultura, KondensKompressor es lo que se conoce como la técnica que produce agua destilada con radiación solar. Se trata de un sistema muy eficaz y muy simple que provoca un ‘goteo solar’ y que permite reducir el agua de riego 10 veces en comparación con los sistemas tradicionales.
Por lo tanto, es un un mecanismo realmente efectivo si tenemos en cuenta algunas de las situaciones de sequía que han sufrido algunas regiones de nuestro país en los últimos años. Por si fuera poco, su elaboración es tan sencilla que tan solo necesitas tener a mano unas cuantas garrafas de plástico.
Un sistema de riego por goteo casero
El primer paso que debemos dar es tener claro cómo funciona el mencionado KondensKompressor. Este sistema atrapa el agua evaporada de la tierra y del depósito que hay en el interior gracias a la energía solar.
Por lo tanto, la humedad se condensa por las paredes interiores y cae en forma de goteo de nuevo a la tierra, dirigido por las propias paredes. Además, durante la noche tiene doble función debido a que también recoge cierta cantidad de rocío.
Es importante destacar que el agua que produce el sistema no tiene sal y tampoco nitratos y otros contaminantes. Por dicha razón es por la que puede utilizarse, incluso, para desalar agua marina, algo especialmente útil para los agricultores de esos países en los que resulta complicado obtener agua dulce.
El paso a paso de su fabricación
Como material principal para fabricar este invento casero tenemos las botellas PET o de vidrio. De manera más específica, se necesitan dos de ellas por cada planta. Una de esas dos tiene que ser una garrafa de cinco litros, mientras que la otra, colocada en su interior, puede ser de uno o de dos litros.
Su sencillez no es lo único que destacamos de este sistema, sino que también requiere poco mantenimiento. Vale con reabastecer de agua el depósito cuando sea necesario, así como arrancar las malas hierbas del interior.
Para ello, lo primero es cortar por la base la botella exterior, la más grande. Colocaremos la botella más pequeña dentro de ella, cortada por la mitad y usando la parte de la base. De la misma forma, ponemos esta sobre la tierra llena de agua y la tapamos colocando la botella de cinco litros.
Ambas botellas tienen que estar en una posición que permita que, al abrir la tapa de la botella grande, se pueda verter agua sobre la pequeña del interior. Además, irán colocadas junto a la planta que queremos que reciba el goteo solar.
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Como consejo, es útil poner alrededor del sistema algunas hojas secas o pajas para mantener la humedad del suelo y, así, conseguir que el sistema de destilación solar sea aún más eficiente. En el momento en el que está armado correctamente, tan solo queda esperar a que actúen las fuerzas de la naturaleza.
Será entonces cuando los rayos del sol incidan sobre la botella exterior, eleven la temperatura del aire dentro de ella y provoquen lo que se conoce como efecto invernadero. Tal situación va a dar lugar a que el agua de la tierra y de la botella interior se evapore, con la consecuente saturación de humedad del aire en el interior de este pequeño ecosistema.