Christian Gortázar, catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha, investigador del IREC -Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos- y uno de los científicos con mayor reconocimiento mundial en enfermedades en animales silvestres y zoonosis, ha sido otro de los nombres con autoridad que han criticado el proyecto de la ley animalista del Gobierno a través de un vídeo publicado por el Proyecto Aristeo.
Este proyecto está formado por una organización sin ánimo de lucro que nace a partir de la alianza de un grupo de cazadores comprometidos y enfocados en promover y revalorizar la actividad cinegética, así como el Medio Natural y la conservación de éste. En el vídeo difundido por el Proyecto, Gortázar denuncia la realidad que esconde la Ley de Bienestar Animal: «Habría que retirar el proyecto actual, comenzarlo desde cero, elaborarlo desde el Ministerio de Agricultura, que son los que verdaderamente saben de este tema y tener en consideración todas las opiniones», señala.
«Me preocupan profundamente las consecuencias de la ley en actividades a las que me dedico científicamente»
Gortázar señala que, para él, el bienestar animal «es una ciencia, y es un conjunto de herramientas que existen para asegurar el mejor estado físico y de todo tipo de los animales que producen cualquier tipo de utilidad para el hombre, ya sean de compañía o de trabajo». Se trata de «una normativa en la que la Unión Europea es líder mundial».
El investigador recuerda que él no es cazador ni ganadero, «por lo que no me afecta personalmente, pero me preocupa profundamente por las consecuencias que va a tener en actividades a las que me dedico científicamente, bien sea ganadería, biodiversidad, caza…».
El proyecto «hay que retirarlo y pensar algo totalmente distinto»
En cuanto a los cambios del proyecto, cree que hay que comenzarlo desde cero: «Hay que retirarlo y pensar algo totalmente distinto; para empezar, se debería hacer desde el Ministerio de Agricultura, que son quienes saben del tema, y considerando todas las opiniones diversas que hay sobre nuestra relación con los animales en la sociedad española. Puestos a cambiar un solo aspecto, no sería suficiente: habría que cambiar, al menos, la exclusión de todos aquellos animales que no sean puramente mascotas que viven dentro de las casas. Todos esos animales hay que excluirlos sin excepción. Y luego establecer claramente que esta regulación no puede contravenir las regulaciones de protección de la biodiversidad», defiende Gortázar.
«Es un verdadero desastre»
Sobre en qué afectará esta ley al resto de la sociedad, explica que «afectará a sectores muy distintos: al ganadero, por la dificultad en la selección y mantenimiento de perros de trabajo, al sector cinegético por las dificultades implícitas en el uso de animales de trabajo y las consideraciones poco claras en cuanto a las cuestiones propiamente de bienestar animal, pero sobre todo a la biodiversidad, puesto que la aplicación estricta del proyecto impide el control de especies problema como el jabalí, los gatos urbanos u otras especies. Es un verdadero desastre», concluye.
