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La ronca del gamo se adelanta: graban a dos grandes machos peleándose

Un gamo corriendo. © Shutterstock

Como todo cazador sabe, la ronca es el nombre con el que se conoce la llamada con la que los gamos (Dama dama) intentan cortejar y atraer a las hembras y, al mismo tiempo, disuadir a otros machos de competir por ellas en su época de celo. Esto es lo que en los ciervos se correspondería a la berrea.

No se trata de un bramido, como es en el caso de esta última especie, sino que más bien es un sonido grave más corto y gutural, algo que se asimila a un gruñido en forma de ronquido. Es entrecortado y, en ocasiones, podría parecerse a un golpeo de latas.

En general, esta época de celo de los gramos suele tener lugar entre finales del mes de septiembre y el mes de octubre, aunque suele variar en función de la altitud, comenzando antes en el sur. Así, los partos, después de ocho meses de gestación, se producen a finales de la primavera, el momento de mayor disponibilidad de alimento en el monte.

Gamo roncando. © Shutterstock

Ronca antes del otoño

Sin embargo, esta vez la ronca parece haberse adelantado ligeramente a la llegada del otoño. Miguel García-Escudero Gómez ha hecho llegar al equipo de Jara y Sedal una imagen que grabó el pasado sábado, 21 de septiembre. En ella podemos ver a dos grandes machos de gamo peleándose, algo habitual en esa época de celo de la especie.

Según él mismo ha contado, acudió al campo, «como de costumbre», con su familia y unos amigos, cerca de un pueblo de la provincia de Toledo. «En mi familia, somos unos amantes del campo y de la caza, y siempre estamos deseando que llegue el mes de septiembre para disfrutar de la magia que nos da la época de berrea y así aliviar un poco esa vuelta a la rutina después de unos largos meses de vacaciones», ha contado.

«Esta tradición de ir a escuchar la berrea lleva muchos años persiguiéndonos, pero nunca habíamos tenido la suerte de poder presenciar lo que hemos visto esta temporada», ha confesado Miguel. En torno a las 19:00 horas, aparcaron el coche y colocaron unas mantas «junto con un exquisito aperitivo» que preparó su madre.

Un sonido de pelea

«La berrea se estaba escuchando muy fuerte cuando, de pronto, empezamos a escuchar golpes muy fuertes, llevándonos a intuir que cerca había dos grandes animales peleando», ha destacado sobre la escena que estaban a punto de visualizar. «Mis hermanos y yo decidimos ir a buscarlos, guiándonos por nuestro sentido del oído. Llegamos así a un pequeño alto donde pudimos apreciar a través de los prismáticos que era al otro lado del barranco donde estaba transcurriendo la pelea».


Graban un precioso gamo en ronca con un cuerno partido


Justo después de esto, Miguel y su hermano de 12 años decidieron intentar observarlo más de cerca. «Con gran dificultad, pero inmensa ilusión, conseguimos cruzar el barranco. Ya se escuchaba muchísimo más cerca», ha continuado recordando. «En ese momento, y según nos acercábamos, decidí sacar mi teléfono para grabar cómo llegaba al sitio, pues pensaba que en cuanto me viesen se echarían a correr».

En contra de lo que pensaba, finalmente esto no ocurrió así. «Con el latido del corazón a mil y un pulso que me temblaba como nunca, mi hermano y yo pudimos presenciar a dos enormes gamos luchando justo delante nuestro, una de las escenas más bonitas que la caza te puede ofrecer, y que recordaremos seguro el resto de nuestras vidas», ha concluido reconociendo Miguel.

       
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