Las plataformas de comercio electrónico como AliExpress, Temu o Shein han llegado a nuestras vidas para quedarse y cada vez es más habitual visitarlas para adquirir productos desde casa a precios muy competitivos. Estas aplicaciones ofrecen desde ropa y accesorios hasta dispositivos electrónicos, utensilios para el hogar o de ocio, atrayendo a consumidores de todo el mundo con sus ajustados precios y rápidos envíos internacionales.
Sin embargo, no todo es tan sencillo como parece. Si vas a realizar compras en estas plataformas, deberás estar al tanto de las normativas que nos afectan.
Es el caso de algunos productos que a pesar de no estar prohibidos en su país de origen, sí lo están en España. Hablamos por ejemplo de los tirachinas perfeccionados que se venden en este tipo de plataformas y que cuentan con dos características que los convierten en herramientas prohibidas en España: un mango anatómico para una mejor sujeción y una goma tubular que aumenta la contundencia del disparo.
Ya en 2014 la Guardia Civil llevó a cabo una importante operación en Lliçà de Vall, Barcelona, donde incautaron 697 tirachinas procedentes de Taiwán que fueron catalogados como armas prohibidas, marcando el mayor decomiso de este tipo en Cataluña.
La investigación comenzó cuando el equipo de inspecciones de armas de la comandancia de Tarragona detectó que estos dispositivos estaban siendo ofertados por un distribuidor a varias armerías de la región. Las indagaciones revelaron que una remesa de estas armas había ingresado a España y que el distribuidor operaba desde la provincia de Barcelona.
El caso de la navaja de Aliexpress y la multa de 800 euros
Otro ejemplo claro es el de las navajas automáticas, un artículo que puede parecer una simple herramienta o un objeto de colección, pero que puede resultar en una multa de 800 euros impuesta por la Guardia Civil. Este fue el caso de Víctor, un usuario español de AliExpress, quien compartió su experiencia en Forocoches.
Víctor, un aficionado a las armas de colección, compró una navaja automática por menos de 20 euros en AliExpress a principios de 2022. Para él, no era más que una pieza más que añadir a su colección, que ya incluía un fusil de airsoft y un cuchillo nepalí. Sin embargo, la navaja nunca llegó a su domicilio. En su lugar, un año después, recibió una carta certificada de la Guardia Civil con una multa de 800 euros por la compra de un «arma prohibida».
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La razón detrás de esta sanción es que en España las navajas automáticas están prohibidas por el Real Decreto 137/1993, de 29 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Armas, a menos que existan excepciones muy concretas. En este caso, la navaja automática con una hoja de ocho centímetros fue detectada por Vigilancia Aduanera, lo que desencadenó la multa.
Desde 1993, las navajas automáticas han sido consideradas armas prohibidas en España. Según la ley, tanto el comercio, fabricación, almacenamiento y tenencia de este tipo de armas sin autorización está sujeto a sanciones que oscilan entre los 300 y los 30.000 euros. Además, la Ley de Seguridad Ciudadana de 2015 refuerza esta prohibición, incluyendo también a las navajas con una hoja superior a 11 centímetros, sean automáticas o no.
Filtros de aceite vendidos como silenciadores
Ya hace unos años desde la redacción de Jara y Sedal exponíamos otro caso parecido a estos, también ocurrido en la misma plataforma: Aliexpress. Entonces, la Intervención Central de Armas y Explosivos de la Guardia Civil recibió una denuncia que informaba de que la web estaba ofertando «filtros de combustible» que realmente serían supresores de sonido para armas de fuego.
Más conocidos como silenciadores, estos también están prohibidos por la normativa española. El artículo cinco del Reglamento de Armas, así lo dispone.
Las multas por su uso podrían llegar hasta los 60.101,21 euros. Aunque, tal y como contó entonces a Jara y Sedal Pedro Morrás, secretario de la Federación Sectorial Armera, el castigo puede ser aún mayor: «En caso de considerarse una infracción del artículo 563 del Código Penal, que regula la tenencia de armas prohibidas y la de aquellas que sean resultado de la modificación sustancial de las características de fabricación de armas reglamentadas, podría implicar una pena de prisión de uno a tres años» puntualizó Morrás.
Estos casos ponen de manifiesto la importancia de conocer y respetar las normativas al realizar compras en plataformas de comercio electrónico. Aunque los precios y la variedad de sus productos pueden ser tentadores, es fundamental estar informado para evitar sanciones y problemas legales. La Guardia Civil continúa alerta y advierte a los consumidores sobre las posibles consecuencias de adquirir productos prohibidos, recordando que la ignorancia de la ley no exime de su cumplimiento.