Las diferencias entre el mundo rural y los núcleos urbanos han provocado, en los últimos años, el distanciamiento de ambas esferas de la sociedad. En ocasiones, esto ha generado grandes faltas de entendimiento y, ante tales circunstancias, Francia ha decidido actuar protegiendo la vida de los pueblos.
Tal decisión del país vecino ha venido motivada por las más de 18.000 denuncias contra los agricultores y ganaderos franceses que han recibido los tribunales. Lejos de poder considerar sus motivos como argumentos de peso y razones fundamentadas, algunos de ellos han sido, por ejemplo, las molestias que les causa el canto del gallo.
Francia protege a sus ganaderos y agricultores
Según ha informado el medio TF1 Info, solo en 2023 Francia registró en torno a 1.300 procedimientos judiciales como consecuencia de conflictos relacionados con los ruidos o con los olores de dichas zonas rurales. Es por ello que el Parlamento francés ha tomado la decisión de blindar la vida rural.
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Éric Dupond-Moretti, ministro de Justicia en Francia, ha explicado que con esta nueva ley ponen fin a «las demandas abusivas contra los agricultores que no hacen más que su trabajo». De hecho, llegó a considerar como «surrealista» que «los tribunales estén atascados con disputas sobre las vacas mugiendo por la noche».
Cada vez son más comunes este tipo de polémicas entre el mundo rural y el urbano, y no solo en el país vecino, sino también en el campo español. Por lo tanto, gracias a esta reciente medida con la que se ha posicionado claramente al lado de sus pueblos, Francia ha sentado un precedente que quién sabe si podrían tomar como ejemplo en España.