Ecologistas piden atrapar los ejemplares de un águila superdepredadora que el MITECO soltó hace meses en Asturias
Fue el pasado mes de marzo cuando, en el Comité de Flora y Fauna Silvestres, los representantes de los gobiernos gallego, asturiano y cántabro anunciaron que retiraban su apoyo al Proyecto de Reintroducción del Pigargo en Asturias. Esta es una especie de águila y una de las mayores aves de presa de Europa.
Tras dicha decisión, la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies solicitó al Principado que capturara y retirara los pigargos que se habían liberado hasta el momento. Sin embargo, esto aún no se ha llevado a cabo.
El Proyecto Pigargo nació con el objetivo de reintroducir la especie en España a partir de los ejemplares llegados de Noruega. En cambio, la polémica no tardó en llegar y biólogos y ecologistas de las regiones afectadas comenzaron a advertir del peligro que esto supondría para las especies autóctonas.
La petición de captura de las aves
Las asociaciones ambientalistas sostenían que este superdepredador, el cual se alimenta de peces, otras aves y mamíferos, puede provocar graves problemas para la conservación de especies amenazadas de la fauna asturiana.
Por esta razón, solicitaron que se procediera a la captura de los ejemplares liberados en los últimos meses «sin demora». Pese a ello, el Principado y demás gobiernos implicados aún no han tomado las medidas pertinentes.
Ahora, la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies ha emitido un comunicado expresando que «si se ha considerado que la introducción de la especie no es viable, debido entre otras causas a las probables interacciones negativas con la fauna autóctona, deberían capturarse las aves liberadas hasta el momento para evitar esas interacciones. Nuestra petición no ha sido tenida en cuenta y a día de hoy, cinco meses después, las aves siguen libres con el impacto que supone».
El águila superdepredadora amenaza a la fauna autóctona
En respuesta, la asociación GREFA, promotora del Proyecto Pigargo, ha asegurado recientemente que no se han producido interacciones entre los pigargos liberados y especies protegidas. La Coordinadora, en cambio, denuncia que «esa es una afirmación carente de todo rigor puesto que las aves vuelan libres y se desconoce lo que hacen en cada momento».
Para documentarlo, han publicado una noticia, apoyada con fotos. En ella demuestran un encuentro «poco amistoso» entre Mónica, uno de los quebrantahuesos liberados por la Fundación para la Conservación del Quebrantahuesos y uno de los pigargos introducidos.
Por último y ante la falta de respuesta del gobierno regional, la Coordinadora ha añadido que «como hasta el momento presente no tenemos noticias de que se haya actuado en el sentido de capturar a estas aves, volvemos a reiterar nuestra petición al Principado, solicitando también el desmantelamiento de las instalaciones que el proyecto tiene en la costa de Pimiango (Ribadedeva) en suelo de Costas».