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Una joven caza un gran corzo atrayéndolo a solo cinco metros con un reclamo infalible

La cazadora con el extraordinario corzo.

La caza es esa actividad capaz de regalarnos, además de un agradable y constante contacto con la naturaleza, momentos únicos que resultan muy difíciles de olvidar. Esto es justamente lo que le ha pasado a esta Natalia Jiménez, quien, con ayuda de un buttolo, ha conseguido dar captura a un gran corzo encelado después de un largo tiempo tras él.

El equipo de Jara y Sedal se ha encargado de hablar con la protagonista para conocer más detalles de esta experiencia. Tal y como ella misma cuenta, a principios de abril del año 2022 acudió al coto, junto a su pareja, para ver qué encontraban antes de que comenzara la temporada del corzo. Tras una gran nevada, pudieron grabar un ejemplar de esta especie en medio de un campo.

El corzo en la nieve

Su primera experiencia de caza con buttolo

Una vez empezó la temporada, decidieron volver a buscarlo, pero sin éxito. «Casi un año y medio después, una tarde picaba la curiosidad de si lo habrían cazado. Sin intención de encontrar nada, probamo a tocar el buttolo donde creíamos que podría estar encamado el corzo», recuerda la cazadora.

Asimismo, detalla que tenía curiosidad por ver «cómo era cazar con buttolo ya que me decían que es una caza emocionante, pero nunca lo había vivido». Al principio, la pareja hizo sonar el reclamo en medio del bosque, aunque no obtuvo ningún resultado.

Al cabo de unos 15 minutos, comenzaron a escuchar ruidos y, unos instantes más tarde, se dieron cuenta de que un corzo los observaba a escasos cinco metros. «Le apunté y le disparé en el pecho, cayendo a nuestros pies. Dio muchísima impresión verle tan de cerca», cuenta la cazadora.

Detalle de la cuerna del corzo.

Ante tanta emoción y adrenalina, la pareja se dio cuenta de que se trataba del corzo que habían visto hacía un año y medio en la nieve. «Al ver el tamaño de las cuernas no dábamos crédito. Nos dimos cuenta de cómo es la caza. Entre tantos corzos que podrían haber salido… salió el que tantas noches nos dejó en vela», concluye la cazadora.

       
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