Las cámaras trampa son una herramienta muy útil para los cazadores. Estas permiten capturar imágenes y/o vídeos de animales vertebrados, incluso durante la noche cuando la luz brilla por su ausencia. Una muy curiosa es esta que vamos a ver de un ejemplar de zorro.
Estas cámaras se activan por sensores de movimiento y están equipadas con luces infrarrojas que pueden ser visibles o invisibles, dependiendo del modelo. Son muy interesantes para mamíferos, aunque también se suelen utilizar para vigilar fincas o parcelas.
Al usarlas en la montaña o en el bosque, como es el caso del siguiente vídeo, lo más frecuente es colocarlas en el tronco de un árbol, aunque cada uno tiene sus propios trucos y preferencias.
Se pasea por delante de la cámara con un corcino en la boca
Aparece de frente, justo en la línea de la dirección a la que apunta la cámara. El zorro, como si supiera que lo están grabando, se para delante de ella y suelta el corcino en el suelo. Ahí se queda durante unos segundos descansando del esfuerzo que le supone transportar los restos de la cría de corzo.
Un zorro y un perro de caza se alían para cazar juntos a una presa
Después de esto y como si nada hubiera pasado, el animal vuelve a coger al pequeño cérvido que llevaba en la boca y pone en marcha el rumbo que había pausado. Tras varios intentos para sujetarlo con la boca, finalmente ambos desaparecen por la derecha de la imagen.
El vídeo ha sido publicado en TikTok, en el perfil de cazahunterspain, hace tan solo unas horas. En ese escaso tiempo ya ha conseguido alcanzar cerca de las 3.000 visualizaciones y, de igual modo, ha provocado la reacción de casi un centenar de usuarios de esta red social en forma de ‘Me gusta’.
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