El mundo natural no deja de sorprendernos, y a veces, a través de las redes sociales, nos permite atisbar momentos tan extraordinarios como el que ha capturado recientemente Joan Catalá, un conocido cazador español. Catalá, quien ha ganado numerosos galardones en la prestigiosa Feria Cinegética por algunas de sus capturas, ha compartido un vídeo en su perfil de Instagram que ha llamado la atención de la comunidad cinegética y de los amantes de la naturaleza. En el vídeo, se puede ver a una corza seguida por cuatro corcinos, un hecho tan raro que ha despertado el interés de expertos y aficionados por igual.
Un caso excepcional: cuatro corcinos
El hecho de que una corza sea seguida por cuatro corcinos es algo muy poco común. Lo habitual es que una corza dé a luz a una sola cría en cada parto. En ocasiones excepcionales, puede tener dos corcinos, pero ver a una corza con cuatro crías es extremadamente raro.
Para entender la magnitud de este acontecimiento, es importante conocer un poco más sobre el ciclo reproductivo de los corzos. Las corzas suelen tener una gestación de aproximadamente nueve meses. Sin embargo, algo interesante sucede durante este proceso: experimentan una «diapausa embrionaria», una pausa en el desarrollo del embrión que permite que el parto ocurra en el momento más favorable para la supervivencia de las crías, normalmente en primavera. Este mecanismo asegura que las crías nazcan cuando las condiciones climáticas y la disponibilidad de alimento son óptimas.
El vídeo, que puedes ver más abajo, muestra a una corza junto a sus cuatro crías en un comedero instalado por cazadores en mitad del monte. La escena es tranquilizadora: la madre y sus pequeños se alimentan en calma, ajenos al cazador que los observa desde la distancia.
¿Por qué son raros los partos múltiples en corzos?
Los corzos, como otros cérvidos, están adaptados a un ciclo reproductivo que prioriza la supervivencia de las crías. La mayoría de las veces, las corzas dan a luz a una sola cría, ya que esto maximiza las posibilidades de que el pequeño corcino reciba toda la atención y los cuidados necesarios de su madre. En otras ocasiones (menos frecuentes), la corza puede tener dos crías, lo cual ya representa un desafío significativo en términos de alimentación y protección.
Diapausa embrionaria del corzo: la magia que permite pausar la gestación
El caso de cuatro corcinos es excepcional porque requiere que la corza esté en condiciones físicas óptimas. La madre necesita una gran cantidad de recursos para gestar y luego alimentar a tantas crías. Además, cuidar de cuatro corcinos puede ser un reto enorme en términos de protección frente a depredadores y competencia por alimento. La corza debe asegurarse de que todos sus pequeños estén bien alimentados y seguros, lo que supone una enorme demanda de energía y vigilancia.
Partos múltiples en corzos: factores y desafíos
Existen varios factores que podrían influir en un parto múltiple en corzos, aunque estos casos sean raros. Uno de ellos es la genética; algunas corzas pueden tener una predisposición genética a tener más de una cría. Otro factor es la disponibilidad de alimento. En áreas donde el alimento es abundante y de buena calidad, es más probable que una corza pueda soportar el costo energético de llevar a término a múltiples crías.
Sin embargo, aunque tener más de una cría puede parecer ventajoso, también trae consigo varios desafíos. Cuantas más crías tiene una corza, mayor es la competencia entre ellas por el alimento y mayor el riesgo de no sobrevivir al primer año de vida. Además, la madre tiene que dividir su atención y cuidado entre todos ellos. Esto hace que los partos múltiples sean arriesgados, tanto para la madre como para las crías.