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Un nuevo estudio revela qué pasa cuando un lucio se lleva tu aparejo

Investigadores de una universidad canadiense han intentado arrojar luz sobre un hecho que ocurre a menudo en la pesca: un lucio rompe el sedal y se lleva el aparejo enganchado. ¿Qué sucede con él? 
31/3/2017 | Redacción JyS

Foto: Shutterstock

La investigación llevada a cabo por la Universidad de Carleton (Canadá) ha ahondado en una cuestión que todo pescador se ha preguntado después de irse un pez con el aparejo enganchado a su boca. ¿Qué es de ellos? Los científicos han basado su estudio en una especie, el lucio europeo.
Chris Pullen, estudiante que dirigió la investigación, colocó señuelos en la boca de los peces con anzuelos exactamente iguales que los utilizados para pescar; pero con una diferencia: éstos llevaban incorporado un dispositivo de seguimiento para saber si se soltaban y cuándo.
En concreto se utilizaron cuatro tipos diferentes de cebos artificiales sobre cuatro ejemplares. Se colocaron distintos tipos de anzuelo, con muerte y sin muerte; y en distintas posiciones: sobre la mandíbula superior, sobre la inferior, sobre las dos, y un último introducido en la boca de otro lucio, ya que es frecuente que se los traguen en situaciones reales de pesca.
Los cebos con muerte salieron expulsados en menos de 24 horas. Sorprendentemente, los señuelos alojados con más profundidad salieron más rápido que los que se colocaron en la mandíbula. Según los investigadores, los rapalas que se quedaban enganchados en la boca no molestaban tanto a los lucios, por lo que no hacían tanto esfuerzo para quitárselos.
Por estas razones, los científicos aseguran que si el animal se traga el engaño y este queda atrapado de manera profunda en la boca del animal, es mejor cortarlo que intentar sacarlo.

       
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