El hallazgo de dos jabalíes infectados por peste porcina africana (PPA) en Bellaterra, junto al campus de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha encendido un dispositivo urgente de vigilancia en Cataluña y ha reabierto una pregunta clave para cualquier persona que transite el monte estos días: qué hacer si aparece un jabalí muerto o moribundo en el campo.
Las autoridades sanitarias españolas han confirmado que las muestras analizadas en el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete han dado positivo. Se trata de la primera detección de la enfermedad en España desde 1994, un intervalo que explica la inquietud en el sector porcino y en los servicios veterinarios. Aunque la PPA no afecta a los humanos, su impacto económico es enorme y requiere actuar con precisión.
La Generalitat comunicó el foco al Ministerio de Agricultura, que a su vez lo ha trasladado a la Unión Europea y a la Organización Mundial de Sanidad Animal. La zona de Bellaterra ha quedado bajo un protocolo estricto: área infectada delimitada, búsqueda activa de restos y suspensión de actividades que puedan favorecer la dispersión del virus. Paralelamente, las granjas de la zona recibirán inspecciones para verificar las medidas de bioseguridad.
Cómo identificar una situación de riesgo real
Encontrar un jabalí muerto no implica necesariamente la presencia de PPA, pero las autoridades insisten en la importancia de valorar el contexto. Tres preguntas pueden orientar la gravedad del hallazgo: si hay un solo cadáver o varios, si el cuerpo es fresco o son ya solo piel y huesos, y si está lejos o cerca de una carretera. La combinación de varios animales, un cadáver reciente y un hallazgo en zona remota eleva la sospecha.
Ante cualquiera de estas circunstancias, los veterinarios recuerdan que no debe manipularse el animal salvo que sea de pequeño tamaño y únicamente contando con guantes, bolsas y elementos adecuados. El objetivo es minimizar cualquier riesgo de transmisión, por pequeño que parezca.
La situación actual, tras los positivos en Bellaterra, obliga a extremar precauciones. La mortalidad asociada a la PPA en jabalíes puede ser elevada y los animales enfermos suelen mostrar apatía, fiebre o búsqueda desesperada de agua. Las lesiones típicas —como bazo agrandado o infartos esplénicos— solo pueden confirmarse mediante análisis veterinarios, por lo que cualquier sospecha requiere notificación inmediata.
Pasos a seguir si localizas un jabalí muerto
La recomendación principal hasta el momento es clara: contactar con las autoridades cuanto antes. Si existe un sistema autonómico específico de avisos, debe utilizarse de inmediato; si no, puede comunicarse con el 112 y solicitar que la llamada sea transferida al Seprona, detallando la localización y el motivo del aviso. También es útil informar a agentes forestales o de medio ambiente, si se encuentran en la zona.
Se aconseja describir con precisión el lugar del hallazgo, facilitar un número de teléfono para posteriores consultas y tomar varias fotografías del cadáver y del entorno. El uso del GPS del teléfono para compartir la ubicación agiliza el trabajo de los equipos veterinarios. Muchas patrullas recuerdan que marcar la vegetación con una cinta blanca o de color vivo ayuda a localizar el punto exacto.
Los servicios veterinarios insisten en que el aviso temprano puede evitar una dispersión silenciosa del virus. «Aunque puede haber otras causas de mortalidad de jabalíes en España (…), la enorme repercusión de la PPA para el sector porcino y para el sector cinegético hace muy importante alertar a las autoridades veterinarias inmediatamente cuando se detecten jabalíes muertos o moribundos», recoge este manual de actuación publicado por el MPA en 2019.
El movimiento de jabalíes entre países de la UE está prohibido, y cualquier propagación dentro del territorio nacional obligaría a medidas más drásticas. Por eso, cada aviso cuenta.
