La Federación de Caza de la Comunidad Valenciana (FCCV) consiguió este martes, 13 de diciembre, que las Cortes Valencianas incluyeran su propuesta de reconocer la función de los perros de caza y otros animales con necesidades y actividades específicas en la Ley de Bienestar Animal autonómica.
En un gobierno donde el animalismo está muy presente, se ha conseguido a propuesta de la FCCV aprobar la enmienda del grupo socialista que excluye a los perros de caza durante la práctica de la actividad cinegética, con el apoyo del PP y Ciudadanos.
En declaraciones de Lorena Martínez, presidenta de la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana, «se ha dado un paso muy importante». «Han sido meses de intenso trabajo y seguiremos muy pendientes hasta conseguir sacar adelante en la Comunidad Valenciana una ley que entienda y defienda los intereses de la caza», ha argumentado.
Hay que destacar que la Federación de Caza de la Comunidad Valenciana fue la única entidad en defensa de los cazadores que ayer estuvo presente durante la sesión de la Comisión para el debate y votación del dictamen, momento crucial en el que se decidía sobre el futuro de la caza en la Comunitat. Ahora, el texto continuará su tramitación hasta recibir el visto bueno del pleno de las Corts.
Así se han sucedido los hechos en los últimos meses
Según recuerda la propia Federación, el pasado mes de septiembre ésta conoció el contenido de las enmiendas al proyecto de Ley de Bienestar Animal autonómico, que de haber salido adelante tal y como fue redactado hubiera imposibilitado el ejercicio de la caza. Desde de ese momento, la entidad se ha reunido con todos los partidos políticos para plantear una propuesta alternativa que ofrezca las suficientes garantías jurídicas para reconocer la función específica de los perros de caza de la Ley de Bienestar Animal, propuesta que se presentó conjuntamente con AVA-ASAJA y La Unió, principales asociaciones agrícolas y ganaderas de este territorio.
«Lo único que pretendíamos es poder seguir realizando nuestra actividad con normalidad»
Lorena Martínez ha destacado además que lo único que pretendían es poder seguir practicando la caza «con normalidad, conforme a los parámetros y la normativa cinegética que nos regula», más aún en el escenario de superpoblación de conejos y animales de caza mayor que afecta a su región, y donde la caza es «fundamental para regular las poblaciones y evitar daños a la agricultura, accidentes de tráfico y transmisión de enfermedades».
«También queríamos garantizar que tuvieran seguridad jurídica todas aquellas personas que ejercen actividades específicas con animales, como los perros de rescate, seguridad, guía para invidentes, pastoreo, zooterapia… y que con el anterior texto no hubieran podido realizar estas funciones sociales tan importantes», ha añadido la presidenta. Por último destacó que el hecho de que no les afecte a los perros de caza la ley «no significa ni mucho menos que queden desprotegidos, porque fuera del ejercicio de sus funciones específicas, a los perros se les aplica la ley como al resto de animales y además nosotros somos los principales interesados en el bienestar de nuestros compañeros, que la Federación fomenta permanente».
Entre otras cuestiones, como la esterilización obligatoria, la prohibición de criar o la consideración de delito si durante la actividad el perro sufría alguna lesión, se han conseguido también modificar, a propuesta de la Federación.