Un rehalero granadino ha logrado recuperar a su fiel compañero tras cinco días de intensa búsqueda en las escarpadas montañas de Luque, Córdoba. El perro, que se perdió durante una montería el pasado sábado, quedó atrapado al borde de un desfiladero, sobreviviendo milagrosamente gracias a su instinto y a las inclemencias meteorológicas que llenaron de agua los charcos de la zona.
Carlos Cuerva, propietario de la Rehala Los Gemelos de Darro, no cejó en su empeño de encontrar a su can. Acompañado por otros compañeros rehaleros, recorrió palmo a palmo la extensa mancha cordobesa, realizando innumerables llamadas para intentar localizar al animal. «Al finalizar la montería, el perro se fue detrás de unas cabras y, por lo que hemos podido comprobar después, se cayó por una pared vertical y quedó encima de un risco donde ha permanecido todos estos días pudiendo sobrevivir bebiendo en los charcos que había en el monte gracias a las lluvias de estos últimos días», ha confesado Cuerva a la Federación Andaluza de Caza (FAC).
La perseverancia de los rehaleros dio sus frutos. Tras varios días de búsqueda infructuosa, un débil ladrido respondió a una de las llamadas. Inmediatamente, se activó un dispositivo de rescate con la participación del Parque de Bomberos de Baena. Equipados con material especializado para intervenciones en montaña, los bomberos lograron acceder hasta el lugar donde se encontraba el perro, que presentaba signos de deshidratación pero por lo demás se encontraba en buen estado de salud.
Un rescate que trasciende lo deportivo
Este rescate ha puesto de manifiesto el profundo vínculo que une a los cazadores con sus perros, así como el compromiso de los rehaleros con el bienestar de sus animales. Adelardo Villafranca, delegado provincial de la Federación Andaluza de Caza (FAC) en Granada, ha destacado: «Frente a los estereotipos, los prejuicios y los bulos que muchas veces se difunden contra los cazadores y contra una modalidad como la rehala, que en Andalucía fue declarada como Bien de Interés Cultural, este tipo de actuaciones demuestran el vínculo único del cazador con sus perros y el compromiso con la tenencia y el bienestar de sus compañeros».
Un llamado a la concienciación
Este suceso también sirve para recordar la importancia de la colaboración entre diferentes instituciones y colectivos. La rápida actuación de los bomberos, coordinada con los rehaleros, fue fundamental para salvar la vida del perro.
En una sociedad cada vez más urbanita, donde los vínculos con la naturaleza se debilitan, historias como esta nos recuerdan la importancia de preservar nuestros valores y tradiciones, y de cuidar de aquellos que dependen de nosotros como sin duda han demostrado los propietarios de esta rehala.