El inspector Pelayo Gayol es uno de esos héroes vivos que países como España tienen el honor de poseer de vez en cuando. Su existencia, como la de otros gigantes humildes, habría pasado desapercibida para el gran público si no fuese porque Amazon Prime decidió crear una serie inspirada en el cuerpo en el que sirve bajo el título ‘G.E.O. Más allá del límite’.
Este Blas de Lezo del Siglo XXI es el agente más admirado y respetado del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía Nacional, cuerpo de élite dedicado a llevar a cabo las actuaciones más difíciles. Ingresó en él en la década de los 90 y actuó en numerosas operaciones antiterroristas, sobre todo en el País Vasco.
Además, Gayol fue pieza clave en su intervención tras los atentados del 11-M de Madrid y también ha luchado en varias actuaciones contra el narcotráfico en España en los últimos lustros. Una de sus últimas misiones tuvo lugar en Ucrania, donde fue enviado al país en defensa de la Embajada española en Kiev y posteriormente dio apoyo a la evacuación del personal consular y de los ciudadanos españoles en la parte más crítica del asedio, durante el mes de febrero.
Un nombre popularizado tras la serie que protagoniza en Amazon
«La obediencia debida es uno de los valores básicos de la Policía Nacional. En una unidad táctica, esto se lleva más a rajatabla», expone el inspector Pelayo. «Aquí no hay nadie que vaya a una operación solo. Todos son piezas de un engranaje», señalan en repetidas ocasiones a lo largo de la serie, que muestra el proceso de reclutamiento e instrucción de una nueva promoción de agentes del GEO, del cual Pelayo es director. Fue, además uno de los veinte condecorados con la medalla al mérito policial con distintivo rojo por su participación en el rescate de los colaboradores afganos en Kabul, tras la llegada de los talibanes y la salida de las tropas norteamericanas. Pero su nombre se ha popularizado, sobre todo, tras mostrarse su trabajo en la serie que protagoniza en Amazon.
La pesca, su afición menos conocida
Pero una de sus facetas menos conocidas es la de su afición por la pesca, la cual ha exhibido en su perfil de Instagram en un par de ocasiones. Pelayo no comparte muchas imágenes en esta red social, la cual cuenta con más de 40.000 seguidores, aunque sí ha incrementado su actividad tras el estreno del documental. Entre sus publicaciones podemos ver dos muy especiales. En la primera de ellas, de julio de 2020, se puede ver a Pelayo con una enorme dorada en sus manos después de una inmersión junto al comentario: «Cuando se lleva la sal del mar en las venas…»
La segunda data del 28 de noviembre de 2021, y en ella aparece junto a un menor y el comentario «herencia», haciendo alusión a que la pesca es una pasión que se transmite de padres a hijos. El propio Pelayo ha reconocido a Jara y Sedal que la pesca submarina «es una de mis pasiones, a la que no le dedico el tiempo suficiente». Algo nada extraño teniendo en cuenta su exigente trabajo.