El lobo es una de las especies que más problemas está generando en España durante los últimos años. En concreto, los ganaderos suelen ser los que más sufren sus daños. No es diferente el caso que han vivido en un pueblo de Galicia, donde estos animales han acabado con la vida de cinco terneras.
Hace ya varios meses que en Barbanza tienen conocimiento de la presencia de los lobos cerca de más de una decena de granjas repartidas por esa zona. Incluso, algunas de estas han sido víctimas de ataques en los últimos días.
En esta ocasión, el objetivo de los cánidos ha sido la ganadería Barqueiro, una explotación vacuna de Cives, en Mazaricos. Varios lobos consiguieron entrar en las instalaciones, situadas a unos 40 metros de las viviendas del municipio donde se encontraban las terneras de recría y provocaron una auténtica desgracia.
Cinco terneras han sido víctimas de los lobos en Galicia
Juan Carlos Fernández, titular de la explotación, ha detallado a La Voz de Galicia que los depredadores «mataron a dos animales y provocaron heridas muy graves en otros tres que, finalmente, también tuvimos que sacrificar. De los siete que había se salvaron dos que lograron huir».
«Sabíamos que había muchos lobos porque se ven continuamente, pero nunca creímos que llegaran a entrar en los establos para buscar comida. Esto es gravísimo porque si acceden al lugar donde están las vacas adultas —en su caso alrededor de un centenar de cabezas— estaríamos hablando de una auténtica tragedia», ha explicado.
Como consecuencia de este ataque, el productor se ha visto obligado a colocar pastores eléctricos a lo largo del perímetro de las instalaciones para, así, tratar de disuadir a los lobos que siguen merodeando por la zona. Así lo evidencian las pisadas que, tal y como asegura el afectado, había en las inmediaciones del establo.
No es el único ataque
Sin embargo, este no es, ni mucho menos, un caso aislado. La situación está tan extendida que la mayoría ha optado por guardar las vacas y los reses a cubierto como medida de precaución ante la posibilidad de sufrir un ataque.
Desde Ganaderos de Mazaricos han expuesto que «el ganado está mucho fuera y, de hecho, la nueva PAC (Política Agraria Común) apuesta por esto, pero no podemos arriesgarnos». Asimismo, este colectivo pide cambios legislativos que permitan controlar la población de lobos en las zonas donde los daños lo justifiquen.
«Da la impresión de que tenemos que ser nosotros los que nos hagamos cargo de la fauna silvestre y ese no es, evidentemente, nuestro trabajo. No queremos que el lobo desaparezca, pero tiene que haber un equilibrio y en nuestra zona se ve que hay mucha más población de la que indican las estadísticas», concluye Óscar Blanco, presidente de la entidad.