La muerte de David Lafoz, un joven agricultor de 27 años que se quitó la vida en Aragón el pasado 10 de julio, ha sacudido los cimientos del sector primario. Desde entonces, las muestras de apoyo no han cesado y, ahora, un movimiento espontáneo liderado por jóvenes del mundo rural ha alzado la voz en redes sociales para exigir justicia y una investigación seria sobre las causas que llevaron a este joven a poner fin a su vida.
Lafoz era uno de los rostros más visibles de las protestas del campo que movilizaron a miles de agricultores y ganaderos en febrero de 2024. Su figura era conocida por su implicación en la defensa del mundo rural y por haber fundado la Asociación Aragón es Agricultura y Ganadería (AEGA), un colectivo que pretendía dar voz a quienes se sienten asfixiados por una administración cada vez más lejana. Su trágica decisión de quitarse la vida, tras publicar un durísimo mensaje de despedida, ha reabierto el debate sobre la presión institucional y la salud mental en el medio rural.
Un mensaje que ha conmovido a todo el sector
«No aguanto más inspecciones de Hacienda ni de trabajo», escribía David en un desgarrador mensaje publicado en redes, donde también afirmaba que trabajar 18 horas al día no era suficiente para vivir. Su muerte provocó una ola de reacciones en todo el país. Agricultores, ganaderos, asociaciones y personalidades públicas del mundo rural compartieron su dolor y denunciaron la presión creciente que sufre el sector.
Uno de los vídeos más emotivos ha sido protagonizado por varios agroinfluencers, como Pilar Pascual (@agripilar), que han lanzado una campaña en redes pidiendo que se exija justicia al presidente de Aragón, Jorge Azcón. En sus palabras: «David Lafoz no murió. A David lo arrebataron». El vídeo apela a la unidad del campo y denuncia que el silencio institucional también mata.
Jóvenes comprometidos alzan la voz
En la grabación, que se ha viralizado en TikTok, los jóvenes del campo reivindican su derecho a trabajar con dignidad y sin miedo. «Era hijo, hermano, amigo… una vida llena de sueños que terminó de forma oscura, sin respuestas», denuncian. «El mundo rural merece respeto. David merece justicia. Porque sin justicia no hay paz. Y sin verdad, no hay futuro para nuestro campo».
Este movimiento espontáneo no solo exige explicaciones, sino también cambios estructurales. Los participantes denuncian acoso burocrático, inspecciones injustificadas y la falta de empatía de las administraciones con quienes dedican su vida a trabajar la tierra.
@agripilar ✊ ¡Alcemos la voz! Mencionemos TODOS a @jorgeazcon para que escuche al mundo rural y se exija justicia. No podemos seguir en silencio. 📣 David Lafoz no murió. A David lo arrebataron. Era hijo, hermano, amigo… una vida llena de sueños que terminó de forma oscura, sin respuestas. Hoy, su voz ya no puede hablar, pero la nuestra no se va a callar 🤐 Exigimos al Presidente de Aragón una investigación seria, transparente y urgente. Porque el silencio también mata. Porque cada día sin justicia, es una herida más para nuestro sector. Porque la verdad no puede seguir enterrada. El mundo rural merece respeto. David merece justicia. Porque sin justicia no hay paz. Y sin verdad, no hay futuro para nuestro campo. ¿Te unes en esta lucha? Comparte y exige con nosotros. 🤝
♬ Epic, Cinematic, Orchestral, Cool, Dark, Heavy, Intense, Impression(1010943) – Merry bad ending
El legado de David Lafoz
David Lafoz era mucho más que un símbolo de las protestas. Participó en labores solidarias tras las riadas de Valencia y era conocido en su localidad natal, Belchite, como un joven trabajador y comprometido. Su lucha, ahora, ha sido recogida por una nueva generación que se niega a guardar silencio.
Desde AEGA recuerdan que «David decidió sembrar futuro aquí, con sus manos y con su corazón». Hoy, ese legado se transforma en un clamor por justicia y en una llamada urgente a revisar el trato que las instituciones dan al campo español.
