Tras la muerte de David Lafoz, un joven zaragozano que se ha convertido en símbolo de la lucha contra el abuso de poder por parte de funcionarios públicos, miles de personas han iniciado una campaña para exigir una investigación oficial e impulsar un cambio legislativo. Las redes sociales han comenzado a viralizar una imagen en la que se reclama una inmediata investigación y se lanza una recogida de firmas para exigir responsabilidades y frenar lo que los promotores consideran una impunidad institucional.
En el centro de esta movilización está una petición en la plataforma Change.org titulada “David Lafoz: Responsabilidad a los funcionarios públicos por abuso de autoridad”. En ella, los promotores explican que Lafoz fue «sancionado, perseguido y marginado, no por cometer un delito, sino por encontrarse en el punto de mira de oficiales que ejercieron excesos y abusaron de su poder sin enfrentar consecuencias». La petición ha sumado cerca de 1.500 firmas en sus primeras horas y busca alcanzar las 500.000.
La historia que no se apaga
El nombre de David Lafoz ha ganado relevancia en los últimos meses tras su fallecimiento en circunstancias que aún no han sido esclarecidas del todo. Aunque las autoridades no han ofrecido versiones oficiales detalladas, la familia y numerosos ciudadanos han expresado públicamente su indignación ante lo que consideran un caso flagrante de acoso administrativo y abuso de poder.
«Basta ya de impunidad», denuncia el texto de la recogida de firmas. Los impulsores de la campaña sostienen que los funcionarios pueden emitir informes o iniciar denuncias que, sin necesidad de pruebas o juicios, terminan arruinando vidas enteras: bloqueos de cuentas, cierres de negocios y un largo camino judicial sin garantías ni consecuencias para quienes originaron el problema.
Este malestar ha prendido especialmente en sectores del mundo rural, donde se percibe con más intensidad el poder desproporcionado de ciertas administraciones. La narrativa de Lafoz ha calado como la de un mártir moderno, un ciudadano común que pagó un precio demasiado alto en un sistema que, según sus allegados, no le protegió, sino que lo persiguió.
Nace la propuesta de la “Ley David Lafoz”
El clamor ciudadano no se limita a pedir justicia por este caso concreto. La campaña ha dado un paso más con la propuesta de crear una nueva norma, ya bautizada en redes como la “Ley David Lafoz”. Esta ley buscaría que los funcionarios públicos puedan ser responsables personalmente por los abusos de autoridad que cometan en el ejercicio de sus funciones.
En palabras de los promotores: «La ley actual no exige responsabilidad personal a estos funcionarios públicos que abusan de su poder. Esto fomenta la impunidad y causa sufrimiento innecesario para los ciudadanos». Con este nuevo marco legal, se busca que no solo se reparen los daños causados, sino que se eviten futuros atropellos desde la Administración.
A través de publicaciones como la difundida en redes sociales, se insta a firmar y compartir la petición.
El eco en redes y la indignación ciudadana
El caso ha despertado un amplio respaldo en redes sociales, especialmente en TikTok y X (antiguo Twitter), donde usuarios comparten mensajes como «Justicia para David Lafoz» o «Su marcha no caerá en el olvido». En los comentarios de la publicación original, se pueden leer testimonios que apuntan a una identificación colectiva con la historia de Lafoz: ciudadanos que también se sienten desamparados ante el poder administrativo.
Al margen de las adhesiones individuales, esta movilización está generando una reflexión colectiva sobre el poder de los funcionarios y la falta de mecanismos reales para controlar sus excesos. En un país donde cada vez más personas desconfían de las instituciones, la historia de David Lafoz ha prendido la mecha de una reivindicación que va mucho más allá de su caso personal.
