La fotografía publicada en diferentes redes sociales y medios de comunicación finlandeses causó gran expectación por la singular tonalidad del animal.
10/10/2018 | Redacción JyS
Ver un oso pardo con una tonalidad blanca resulta tan curioso como extraño. En países como Rumanía, Ucrania, Eslovaquia, Finlandia, Suecia y los Balcanes, entre otros, pueden encontrarse ejemplares de plantígrado marrones, rubios o incluso de color casi negro.
Cuando Niilo Isotalo, un estudiante de la escuela secundaria superior de la ciudad finlandesa de Kuopio captó con su cámara a ese cachorro de oso no fue consciente de lo original del protagonista de la imagen. El oso se puso de manos al ver acercarse a un macho de su misma especie, momento que aprovechó el fotógrafo para advertir que sus patas eran del color marrón típico, sin embargo, poseía una gran ‘manta’ blanca que le cubría el resto del cuerpo.
El cachorro de oso tenía las extremidades marrones
Era otoño cuando Isotalo descubrió este animal tan curioso en una reserva natural en Kuhmo, una región cercana a la frontera rusa famosa por su belleza natural, con varias reservas naturales, bosques extensos y más de 600 lagos. Este aficionado había reservado una cabaña en Kuhmo durante cuatro noches para realizar fotografías del follaje de otoño y si había suerte, algún oso.
La foto fue publicada en el periódico sensacionalista Iltalehti, entre otros medios, citando al investigador de caza mayor Ilpo Kojola, quien afirmó que aunque las manchas blancas en los cachorros de oso jóvenes son comunes, un oso tan blanco como el de la foto de Isotalo es muy raro. Y es que la naturaleza nunca dejará de sorprendernos con animales tan singulares como lo es en este caso un oso pardo con pelaje casi totalmente blanco.