Al instalarse en Australia para trabajar en el sector agrícola, un español ha descubierto una realidad que, según cuenta, difiere por completo de la que conocía en España. Su testimonio, difundido en su perfil de TikTok, ha generado interés entre miles de usuarios que comparan las condiciones del campo en ambos países.
El vídeo, publicado en la cuenta @anmaiki —donde reúne más de 22.000 seguidores—, se abre con dos palabras que resumen lo que está a punto de contar: «Granjeros millonarios». A partir de ahí, relata las experiencias acumuladas tras trabajar en dos explotaciones distintas, suficiente, según él, para formarse una opinión clara sobre el nivel económico de muchos productores australianos.
«Los granjeros australianos están forrados», afirma de forma directa. «He trabajado ya en dos granjas distintas y tengo un poco de opinión. Tienen un montón de dinero». Su percepción se apoya en lo que ha visto desde que inició su vida en el país oceánico, donde, asegura, el tamaño de las explotaciones y la estructura del sector explican gran parte de esa diferencia.
Explotaciones gigantes y grandes fortunas familiares
El español sostiene que no se trata de casos aislados, sino de un patrón habitual en determinadas regiones agrícolas. «Todos tienen su avión privado, su barco, un terreno que es enorme», explica mientras detalla que algunas fincas alcanzan dimensiones equivalentes a las de una comunidad autónoma española. Ese tamaño, comenta, multiplica el volumen de producción y los beneficios, especialmente entre quienes heredaron terrenos hace décadas.
«La gente que consiguió terrenos hace ya muchos años está forrada. Tienen 15 mansiones y es una locura», resume. Una concentración patrimonial que, según su testimonio, contrasta con la situación de muchos agricultores europeos, sometidos a mayores cargas de explotación y márgenes más ajustados.
A partir de su propia experiencia, también compara la relación entre campo y ciudad. En España, recuerda, lo habitual es ver cómo los jóvenes abandonan las zonas rurales. Sin embargo, en Australia ha observado el movimiento contrario.
@anmaiki granjeros millonarios
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Del éxodo rural al regreso al campo
El creador español explica que en Australia son numerosos los casos de familias que dejan la ciudad para instalarse en el campo en busca de empleo. La razón, sostiene, es sencilla: hay mucho trabajo y falta mano de obra. El dinamismo económico del sector agrícola contrasta, según su relato, con las dificultades a las que se enfrentan otros sectores urbanos.
A esto se suma, afirma, un fenómeno que ya se nota en las grandes urbes del país. «A la ciudad están llegando demasiados inmigrantes y se están quedando mucho trabajo de ahí porque es mucho más accesible», concluye. Para él, esa presión sobre el mercado laboral urbano contribuye a que muchos australianos opten por regresar al campo, donde las oportunidades —y los salarios— son mayores.