El cielo del norte peninsular vuelve a llenarse de torcaces. Miles de palomas han comenzado a cruzar los Pirineos en lo que ya puede considerarse el primer gran golpe migratorio del otoño. El espectáculo ha sido captado en vídeo por un cazador guipuzcoano y compartido en el perfil @pasioncazaypesca2022, donde las imágenes acumulan cientos de reacciones entre los aficionados.
El colaborador de Jara y Sedal Fran Valverde, que ha difundido el vídeo, explica que fue grabado en Escoriaza (Guipúzcoa) alrededor de las diez de la mañana. En la grabación, el cielo aparece completamente despejado y se aprecia un flujo continuo de torcaces avanzando en dirección suroeste, un auténtico cordón de aves que se prolonga durante varios minutos.
Un paso que no se detiene
«Son bandos de continuo, uno tras otro», comenta Bernardo, el cazador que grabó la escena, mientras las aves cruzan sobre las crestas montañosas. Su testimonio coincide con los primeros registros de avistamientos importantes en distintos puntos del norte, lo que sugiere que el grueso del paso migratorio se encuentra ya sobre territorio español.
Este tipo de movimientos suelen marcar el inicio de las grandes entradas otoñales, que cada año atraen la atención de miles de observadores y amantes de la naturaleza. Las condiciones meteorológicas, con vientos favorables del noreste y temperaturas suaves, han favorecido el desplazamiento de las torcaces desde Europa hacia la península ibérica.
Expectación en los pasos pirenaicos
El avance de las palomas mantiene en alerta a los observadores situados en los principales pasos de migración, como Etxalar, Valcarlos o Roncesvalles, donde se espera que los vuelos se intensifiquen durante los próximos días. Si el tiempo acompaña, el paso podría prolongarse durante toda la semana, ofreciendo jornadas de gran actividad.
Para muchos, estas primeras bandadas suponen algo más que un simple fenómeno natural: son el símbolo del cambio de estación y el inicio de una época que marca el pulso del campo y de la caza en pasos tradicionales. Las imágenes llegadas desde Guipúzcoa confirman que la migración ya ha arrancado y que el otoño de 2025 empieza con fuerza en los cielos del norte.